Con la llegada del frío y teniendo en cuenta la experiencia de años anteriores, el Servicio de Prevención y Extinción de Incendios del Ayuntamiento de Segovia quiere advertir a la población en general del riesgo del mal uso de chimeneas y braseros, calderas e instalaciones de gas, elementos muy utilizados por las familias segovianas en la época invernal. Y es que las intoxicaciones por monóxido de carbono, un gas asfixiante, son «accidentes frecuentes» en estos meses del año a los que, en muchas ocasiones, se suman las llamas. Para evitar cualquier accidente, los usuarios deben adoptar medidas de mantenimiento previas a su utilización, medidas sencillas, pero muy útiles.
La primera de ellas es procurar que personal especializado revise, cada año, las chimeneas, limpiando los tiros y comprobando que estos no estén en contacto con madera, ni tengan figuras los tabiques. Se debe extremar la precaución si no se ha usado la chimenea desde hace tiempo. También es recomendable disponer de un detector de incendios y un extintor portátil a mano.
Hay que mantener una buena ventilación de la habitación donde esté ubicada. No se deben colocar alfombras delante del fuego ni mobiliario con ropa que se pueda prender. Es recomendable instalar pantallas de protección y nunca dejar la chimenea o el brasero encendido por la noche. También es importante evitar que los niños jueguen cerca del hogar y acercar al punto de calor ropa, juguetes, muebles, cojines para evitar que se puedan prender y ocasionar un fuego.
En muchas ocasiones, la construcción de las chimeneas no es la adecuada y se realizan sin tener los conocimientos sobre el peligro que implica el fuego y, muy especialmente, el humo. Los profesionales del Parque de Bomberos de la capital ponen a disposición de la población sus conocimientos y no tienen ningún inconveniente en marcar las directrices y pautas que hagan posible una correcta construcción de las chimeneas así como de las medidas encaminadas a evitar posibles problemas.
Precaución con las chimeneas y braseros
El año pasado, el 65% de los avisos que recibió el Servicio municipal de Bomberos estuvieron relacionados con chimeneas de viviendas.