A pesar del mal tiempo en varios puntos de España, en Segovia en la Plaza de San Martín, portavoces y voluntarios de PACMA, así como diferentes representantes de entidades de protección animal y personas simpatizantes se han desplegado este domingo en 27 concentraciones coordinadas a lo largo del territorio nacional para pedir a Unidas Podemos y al Partido Socialista la inclusión de los perros de caza en el texto final de la Ley de Protección Animal estatal, que se encuentra actualmente en tramitación.
Las organizaciones han ubicado puntos de encuentro en ayuntamientos, subdelegaciones y plazas céntricas de Madrid, Barcelona, Mérida, Salamanca, Bilbao, A Coruña, Córdoba, Algeciras, Ponferrada, Santander, Las Palmas de Gran Canaria, Jaén, Gijón, Guadalajara, Alicante, Donostia, Vigo, Zaragoza, León, Sevilla, Málaga, Valencia, Valladolid, Segovia, Palma de Mallorca, Logroño y Girona bajo el lema «ningún perro fuera de la ley». Se trata de la tercera convocatoria de estas características, habiendo tenido lugar la primera en el mes de septiembre frente a las sedes del PSOE de 13 ciudades, y la segunda en octubre en cerca de una veintena de provincias.
Con estas protestas, la pretensión es conminar a los socios de gobierno a confeccionar una ley «realmente útil y adaptada a los tiempos» que incluya, como entienden que no puede ser de otra forma, también a los perros y otras especies utilizadas en la actividad cinegética. Consideran que la caza es «un nicho de malos tratos» y que los animales utilizados en la misma merecen «exactamente la misma protección que los demás». Argumentan que, con esta distinción, se estarían conceptualizando la existencia de «perros de segunda« cuyo maltrato podría ser menos punible.
Las organizaciones convocantes han apelado al hecho de que esta Ley, tal y como está redactada, supone un riesgo de retroceso para otras normativas de carácter autonómico que no son actualmente tan excluyentes, pudiendo dar lugar a un efecto cascada que llamase al «desamparo legal» de ciertos grupos de animales como consecuencia, y no solo a los perros de caza, guarda o actividades específicas.
El presidente del Partido Animalista, Javier Luna, ha hecho acto de presencia concretamente en la convocatoria de Madrid, en la Plaza del Callao, donde ha explicado que «aún se puede» y que «todavía están a tiempo de arreglarlo«: «en las manos de nuestros políticos gobernantes, y específicamente en las del Partido Socialista y Unidas Podemos, recae el peso de la responsabilidad de decenas de miles de vidas explotadas como para que una ley, cuyo cometido es protegerlas, se permita la licencia de dejarlas a su suerte por bailarle el agua a un grupúsculo de mano larga y gatillo fácil«, haciendo referencia al colectivo de cazadores.