La alcaldesa de Segovia, Clara Luquero, señaló hoy que “todo apunta a un error humano»  el accidente en el que se vio implicado un autobús urbano porque no hubo “una causa mecánica” ya que en el vehículo se comprobó posteriormente que funcionaba con normalidad, incluidos los frenos. Luquero explicó que “lo más duro” del siniestro fueron las cinco personas, entre ellas un niño, que resultaron heridas. Un vecino de Segovia “sigue en observación” en el Hospital General.

Luquero remarcó que la Policía Local se ha hecho cargo de la investigación y “hay que mantener la cautela” pero sí relató el autobús siniestrado estaba en la parada de la avenida Vía Roma, “para ajustar los tiempos de los recorridos”, la conductora se bajó del vehículo y éste empezó a desplazarse por efecto de la pendiente “arrollando a siete vehículos aparcados” y “con daños a un octavo” en circulación por salvar al autobús que invadió el carril contrario, la acera e impactó contra el petril de la avenida Vía Roma.

La alcaldesa aseguró relató que la conductora intentó “denodadamente” subir de nuevo al autobús cayendo al suelo en dos ocasiones, resultando también herida. Luquero lamentó el suceso en el que resultaron atropelladas cinco personas, “un matrimonio de turistas murciano y su hijo que ya se han marchado a su ciudad”, en el que la mujer sufrió fractura de tobillo, y “un matrimonio segoviano», en que el hombre sigue en observación en el hospital porque quedó atrapado entre dos vehículos, al intentar esquivar el autobús.

La investigación sobre las causas del suceso “va a continuar”, remarcó la alcaldesa, pero dejó claro que no se “ha debido un fallo mecánico” porque el autobús pudo regresar circulando, protegido por la Policía Local, hasta las cocheras, después de que el mecánico de la empresa y el concejal de Tráfico y Seguridad comprobaron “los frenos y todo lo demás” y vieron que funcionaba con normalidad. El ordenador de a bordo del autobús tampoco señaló “ningún fallo técnico”.

El autobús está matriculado en enero de 2014 y la semana anterior, apuntó Luquero, se había realizado todo el mantenimiento. La alcaldesa y el Intendente Jefe de la Policía Local, Julio Rodríguez Fuentetaja, mantuvieron la prudencia porque la investigación sigue abierta pero “todo apunta a un error humano”. Luquero también confirmó que la conductora pertenece al personal de refuerzo de la empresa de Urbanos de Segovia para el periodo estival y también quiso destacar que tuvo que ser hospitalizada “por un ataque de ansiedad” después de “ayudar en todo” en el lugar del accidente.

Rodríguez Fuentetaja confirmó que la conductora ya ha prestado declaración y ahora su versión será contrastada con las declaraciones de los testigos y de los peritos y será “la investigación la que nos diga que pasó”. Desde el consistorio, no se desmintió al cien por cien que la conductora se bajó porque se había encendido un piloto en el cuadro de mando y se bajó a hacer una comprobación, tras hacer un reseteo de la batería.

Los conductores de los autobuses, por protocolo, se ponen en contacto con el mecánico para que les den instrucciones, y al bajar pudo olvidar poner el freno. El jefe de la Policía Local también señaló que ha pedido a empresa Urbanos de Segovia una serie de documentación y testimonios de los mecánicos, además el autobús ha quedado precintado.

Falta de ética

La alcaldesa de Segovia fue muy critica con los grupos municipales de Ciudadanos y UPYD, por los comunicados que emitieron tras el accidente, por su “absoluta desvergüenza” para utilizar “de manera partidista” y “sin contrastar la información” porque no se pusieron en contacto ni con ella ni con el concejal. Luquero resaltó que el que no tiene ética en la forma de hacer política tampoco “la tiene en la vida”.

En su opinión, los grupos políticos ante “una situación complicada” tenían que haberse informado y “ponerse a disposición del gobierno municipal” pero Ciudadanos y UPYD “huelen elecciones” y “no les importa utilizar cualquier cosa para sacar rédito electoral”.