CCOO, UGT y CSIF aprobaron hoy en el Consejo de Función Pública el I Plan de Igualdad para los empleados de la Junta de Castilla y León, tras una «larga y difícil» negociación. Esta iniciativa tendrá dos años de vigencia y afecta al personal de educación no universitaria, sanidad y administración general, informa Ical.

En un comunicado conjunto, los sindicatos explicaron que el diagnóstico del Plan expresa las situaciones de discriminación detectadas, entre las que destacan «la baja presencia» de mujeres en puestos de decisión o de responsabilidad; la concentración de mujeres en determinados puestos de trabajo de menor cualificación; la mayor temporalidad de las mujeres; o las diferencias retributivas entre hombres y mujeres, pese a la realización de trabajos de igual valor.

Se han establecido 94 medidas correctoras que se estructuran en ocho ejes: la garantía del uso del lenguaje inclusivo e imágenes no sexistas en la organización; la implantación de sistemas objetivos de selección del personal y contratación; acciones de sensibilización a la plantilla, jefaturas y órganos de selección en materia de igualdad entre hombres y mujeres y para impulsar la concurrencia de mujeres a puestos masculinizados.

También contempla un estudio y posterior implantación de una bolsa de horas recuperables que facilite el ejercicio corresponsable de los derechos de la vida personal, familiar y laboral; la reducción de jornada por lactancia o por cuidado de personas dependientes (mayores o menores) que se podrá acumular en jornadas completas; un protocolo para el embarazo y la lactancia; el Plan de Prevención de riesgos laborales con enfoque de género; un protocolo que garantice la carrera profesional y la movilidad de las empleadas púbicas víctimas de violencia de género, y la incorporación a todos los planes de formación la perspectiva de género.

Asimismo, contempla dar prioridad a la participación de mujeres en los cursos formativos en habilidades directivas; un protocolo específico de actuación ante el acoso sexual y el acoso por razón de sexo; el análisis comparativo de las retribuciones desagregadas por sexos de toda la plantilla, por clasificación profesional y por trabajos de igual valor, incluyendo salario base, complementos salariales y extrasalariales y pagas extraordinarias. Recoge también un sistema de indicadores para realizar su seguimiento y evaluación.

UGT, CSIF y CCOO consideraron que este es un «primer paso» para el que se han necesitado años de negociación. Sin embargo,  manifestaron que aún quedan muchas medidas por desarrollar en el ámbito de la Junta de Castilla y León para alcanzar la igualdad real entre mujeres y hombres.

Finalmente, los sindicatos valoraron este avance y seguirán reivindicando el resto de medidas que fueron propuestas y que no fueron recogidas en el acuerdo definitivo.