La Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de Valladolid reprochó hoy la actitud de la ministra de Sanidad, Carolina Darias, que, a su juicio, «aprovechó el Consejo Interterritorial para imponer unas medidas a las comunidades que no parecen tener sentido” en este momento en que los datos de la pandemia son, a nivel general, mucho más “positivos”, y exigieron una ampliación horaria para el ocio nocturno.
Los hosteleros coinciden en la crítica del vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, que tildó de “autoritarismo” la manera de actuar de la ministra.
Desde la asociación destacaron que el ocio nocturno está en “situación extrema”, ya que muchos de los empresarios no cuentan con terrazas, llevan 15 meses cerrados, soportando muchos gastos y sin una adecuada línea de ayuda. “Reiteramos a la Junta de Castilla y León que no se puede dejar a más gente atrás”.
Pasar a ‘Nivel 2’ en este sector no alivia el problema económico que estos empresarios viven, según el colectivo, ya que la forma de ejercer su actividad es prácticamente nula al no permitirse consumir de pie. “Una vez más debemos, cuanto menos, solicitar una ampliación horaria en este tipo de establecimientos para que poco a poco puedan retomar su actividad profesional y empresarial a los niveles de la prepandemia”, destacó.
La campaña de vacunación y, posiblemente, el mayor compromiso de la población para cumplir las medidas básicas de distancia de seguridad y uso de mascarillas ha posibilitado en la provincia de Valladolid unos mejores números en los datos de ocupación hospitalaria y UCIs, según los hosteleros, quienes agregaron que aunque la incidencia a 14 días ha aumentado, los casos aparecidos no tienen la gravedad y consecuencias de olas anteriores.
El paso al ‘Nivel 2’ permite mantener abierto el interior de los bares hasta la 1 de la madrugada, no permite el consumo en las barras, y posibilita establecer reuniones de un máximo de diez personas, así como mantener el aforo en el 75 por ciento.
Ante este planteamiento, los hosteleros valoran “positivamente” no limitar el horario de las terrazas y que se mantenga el que existía antes del primer estado de alarma, según la licencia de cada municipio.
Regulación bodas
En lo que respecta a las celebraciones de bodas y comuniones, el avance de fase permite pasar de un 35 por ciento de aforo a un 50 por ciento, con la premisa de mantener la distancia entre personas de 1,5 metros, que deben de estar todos ellos sentados en mesa o agrupaciones de mesa de diez personas.
Al respecto, los hosteleros instaron al Ejecutivo autonómico a resolver, de una vez por todas sobre el protocolo que esta Asociación presentó el pasado mes de abril para celebrar con garantías sanitarias este tipo de eventos y ceremonias, sin perjudicar el apartado económico, y que lleva dos meses en evaluación por la Dirección General de Salud Pública.
“No debemos de olvidar que esta ligera mejoría de la situación epidemiológica, está facilitando una reducción de las medidas restrictivas en la hostelería, lo que conlleva que muchos sectores afines comiencen a tener más carga de trabajo y a aumentar su facturación, lo que se traduce en un aumento en el número de los trabajadores que están saliendo de los ERTE”, destacó.
Es por ello, que exigen solicitar al Gobierno autonómico una “prudencia y sensibilidad” espacial a la hora de hacer retroceder de fase a un municipio, pues ello conllevaría un retroceso en el regreso del trabajador a su normal actividad laboral. “El Estado nos tiene que indemnizar y compensar por el daño tan terrible que han hecho al sector hostelero”, reiteró.