El Archivo Histórico Provincial, gestionado por la Junta de Castilla y León, continúa mostrando ‘tesoros ocultos’, como una propuesta divulgativa con la que se pone a disposición del público el patrimonio escondido que contiene la historia de la provincia de Segovia. En esta ocasión, la exposición está dedicada a los soportes de los documentos.
El material del que pueden estar realizados estos soportes es muy variado: desde la piedra o la cerámica a metales como el bronce, muy empleado por los romanos. Para la escritura han existido a lo largo de la historia diferentes soportes. Los antiguos egipcios inventaron una especie de papel vegetal a base de plantas de papiro, que es lo que le da su nombre. Sin embargo, el papiro es una planta subtropical que crece en los pantanos del Nilo y de difícil adaptación en otros climas, por lo que su uso quedó muy restringido a esta cultura.
El pergamino es un invento de los griegos de Pérgamo del siglo II a.C. cuyo uso se generalizó en Europa hasta el siglo XIV. Se trata de una base hecha de piel de oveja, vaca o cabra curtida y tratada de manera que quede plana, extendida y con aspecto de cartulina. La aparición del papel hizo que el carísimo pergamino cayera el desuso. Es un invento chino que llegó a Europa a través de los árabes en el siglo XIII. En origen se fabrica con fibras vegetales como el algodón, el lino o el cáñamo. Es el llamado ‘papel de tela’, muy resistente y barato ya que solía emplear los retales inútiles para otros usos. Si el fabricante o el cliente lo pedían, se personalizaba cada pliego con una marca de agua o impronta que puede llegar a ser muy artística.
Desde el siglo XVII se generalizó el papel industrial, con una calidad cada vez peor al faltar fibras textiles que se sustituyeron por celulosa y lignina extraída de la madera. La acidez de este tipo de papel hace que se degrade con mayor rapidez y se pierda con el tiempo. Este material es fácilmente reciclable por lo que en la actualidad lo reutilizamos generando un material tan malo que podemos calificarlo como de ‘usar y tirar’, que aunque resulta más ecológico da muchos problemas de cara a su conservación hacia el futuro.
En el siglo XIX el invento de la fotografía irrumpió como soporte de documentos de tipo gráfico. El uso de materiales es muy variado en los soportes analógicos: el más antiguo es el cristal, pero también hay otros como el nitrato de celulosa, que era inflamable, o el acetato de celulosa. La era digital ha abierto nuevas técnicas, nuevos materiales y nuevos soportes que a su vez están acabando, precisamente, con estos soportes. Hemos pasado del disquete al pen drive, el CD Rom o el DVD a la inmaterial ‘nube’.
Los visitantes pueden acercarse a conocer el ‘tesoro oculto’ del mes de abril en el Archivo Histórico Provincial en el horario habitual de apertura al público del centro, de lunes a viernes, de 8.30 a 14.30 horas, y los lunes y martes, de 16.30 a 19.00 horas. También se ofrece la posibilidad de realizar visitas guiadas en las que se explicarán con más detalle los soportes documentales. Los pases se realizarán los lunes a las 17.30 horas y los miércoles y viernes a las 12.30 horas mediante petición de cita previa, llamando al teléfono 921 46 10 42.
Foto: muestrario de diferentes soportes/ Archivo Histórico Provincial