Los tres centros asistenciales de la Diputación de Segovia registraron, desde el 15 de marzo, 91 casos positivos por Covid-19 entre sus 281 residentes, lo que supone un 31 por ciento de incidencia. Según los datos hechos públicos por el presidente de la institución provincial y diputado de Asuntos Sociales, Miguel Ángel de Vicente, el 60 por ciento de los residentes con coronavirus superó ya la infección, otro 23 por ciento se encuentra a punto de recibir el alta de las zonas de aislamiento y el 10 por ciento, falleció.
De Vicente trasladó el pésame a las familias de los residentes fallecidos de parte de toda la Corporación provincial. Desde el 15 de marzo murieron 30 personas víctimas del Covid-19, 21 de ellas en el Centro de Servicios Sociales ‘La Fuencisla’; siete en la Residencia de Mayores ‘La Alameda’ de Nava de la Asunción, y dos muertes en el CAMP ‘El Sotillo’. En el Centro Juan Pablo II, donde viven una treintena de menores tutelados, no se registraron victimas mortales ni casos.
En el caso del CSS ‘La Fuencisla’, se produjeron otros tres fallecimientos más por otras causas distintas al coronavirus. En cuanto a la parte positiva, 52 residentes superaron ya la infección recibiendo el alta de las zonas de aislamiento, en las que aún se encuentran 22 personas: 16 en el CSS La Fuencisla y seis en el CAMP ‘El Sotillo’, mientras que la Residencia ‘La Alameda’ es “un centro libre de Covid-19 en estos momentos”.
Con estos datos, Miguel Ángel de Vicente, que visitó en estas semanas estos centros varias ocasiones, destacó “la profesionalidad y humanidad de los profesionales, la dedicación de los equipos directivos y la fortaleza de los residentes que se han adaptado a todas las circunstancias, por duras que fueran en cada momento”. De Vicente enfatizó que se tuvieron que tomar decisiones complicadas “con muy poco tiempo de reacción” pero logrando que más de 83 por ciento de los afectados se hayan curado o estén a punto de ser dados de alta.
El presidente de la Diputación de Segovia no se olvidó “de aquellos que se han quedado en la lucha”, que fueron atendidos “de manera excepcional” por los trabajadores de los centros que dejaron y se siguen dejando la piel cada día. Según los datos comparados en el mismo periodo en los dos años anteriores, en la residencia ‘La Alameda’ fallecieron este 2020, las mismas personas que en 2018 y tres menos que en 2019, mientras que en el CAMP ‘El Sotillo’ murieron una persona más que el año pasado, mientras que en 2018 no se registraron fallecimientos.
El caso del CSS ‘La Fuencisla’, el centro con más muertes, fueron 11 más que en 2018 y 15 más que en 2019. “Estos datos nos hacen pensar que, aunque la pandemia no ha pasado de largo en nuestras residencias”, argumentó de Vicente, “sí hemos sabido tomar las decisiones oportunas para frenar sus consecuencias en gran medida”.
En estos momentos, todos los residentes están testados con PCR o con test rápidos siguiendo las indicaciones del Sacyl, además se realizaron 342 test rápidos entre los profesionales, 32 de ellos han dieron positivo. Entre 48-72 horas después se les hizo el correspondiente PCR, con cuatro casos positivos y dos indeterminados.
Plantillas reforzadas
Según los datos aportados por la Diputación, durante estos casi dos meses, un total de 134 trabajadores los tres centros asistenciales estuvieron de baja laboral, con 71 casos confirmados de Covid-19. Para sustituir estas bajas y, además, afianzar la atención a los residentes, la Diputación hizo 148 nuevas contrataciones de profesionales sanitarios, sociosanitarios y cuidadores de personas dependientes. Las bajas fueron: 84 en el CSS ‘La Fuencisla’; 20 en la Residencia ‘La Alameda’ y 30 en el CAMP ‘El Sotillo’.
Además, se intensificó el número de profesionales de atención directa y se reforzó la atención sanitaria, contratando tres nuevos médicos para el CSS ‘La Fuencisla’ y ampliando las guardias en fines de semana y festivos, así mismo los jefes de Enfermería reorganizaron sus plantillas para asegurar la presencia de, al menos, uno de ellos en cada turno. Precisamente este centro, que consta de tres unidades, modificó su uso como espacio sanitario a partir del 6 de abril, contando con el asesoramiento en la atención y planificación de Médicos Sin Fronteras, a los que posteriormente se sumaron Sacyl y efectivos del SAMUR.
Centrados en las personas
Por último, de Vicente reiteró su agradecimiento a todos los trabajadores que le han hecho sentirse muy orgulloso de ser el presidente de esta institución que demuestra predisposición cada día «para procurar la mejor atención a nuestros residentes”. Sobre los residentes sostuvo que son «un absoluto ejemplo» por su comportamiento” y, muchos de ellos, transmitiendo un mensaje de esperanza al conseguir vencer al virus a pesar de su edad y sus patología. “Sus caras de felicidad al abandonar la zona de aislamiento son de esas imágenes que quedan para siempre grabadas en la retina”, subrayó el presidente de la Diputación.
El objetivo de la institución será seguir trabajando “desde la atención centrada en la persona y no desde la mera custodia” e intentando posibilitar que estar, en estos centros, resaltó, “sea vivir como en casa, garantizando intimidad, cuidado y que las propias opiniones de las personas cuenten”.