El Alcázar de Segovia recuperó este puente del Pilar las cifras prepandemia, con 14.395 visitas estos días. Son datos similares a los de marzo de 2020m según informan desde el Patronato de la fortaleza.
El día de mayor afluencia fue el lunes, día 11, con 3.753 visitantes. El sábado, 9 de octubre, accedieron al monumento 3.429 personas; el domingo 10, lo hicieron 3.726, y el martes, día 12, 2.395. “Los excelentes datos obtenidos constatan el despegue del sector turístico y son un buen indicador para pronosticar el inicio de la recuperación económica a corto plazo”, expresaron desde el Patronato del Alcázar.
Además subrayaron que las aplicaciones tecnológicas que han implementado en los últimos tiempos han permitido, en gran medida, la consecución de altas cifras de visitantes sin menoscabar la seguridad en el interior de la fortaleza ni la calidad en el servicio. En unos días de gran afluencia, los sistemas automáticos de control de aforo demostraron su efectividad para optimizar la ocupación del edificio, a través de la monitorización a tiempo real del número de personas concurrentes en el Alcázar.
Asimismo, la venta a través de internet supuso un cambio significativo en la experiencia de los visitantes. Se trata de un proceso sencillo que permite asegurar el acceso al Alcázar en el horario deseado, así como la posibilidad de visitar también la Torre de Juan II, al contrario que la tradicional venta en taquillas, canal a través del cual el visitante debe adaptarse a las opciones disponibles a su llegada.
La venta anticipada a través de la página oficial del Alcázar tuvo una magnífica acogida durante el puente de octubre: casi el 40 por ciento de las entradas se vendieron por este canal. Algunos productos, como las entradas que incluyen la subida a la torre de Juan II, incluso se agotaron días antes de inicio del puente, por lo que solo aquellos visitantes que realizaron la compra anticipada tuvieron la ocasión de disfrutar de este tipo de visita.
Según las previsiones del Patronato del Alcázar se encaminan hacia un aumento progresivo de la comercialización de entradas a través de internet, sobre todo en periodos vacacionales, festivos y fines de semana, cuando la presión turística que soporta la ciudad será mayor y, por tanto, la reserva previa de entradas se convertirá en una herramienta útil, simple y eficaz al alcance del turista, que de este modo podrá asegurarse el acceso al Alcázar y, a la vez, evitar esperas innecesarias en las taquillas.