La Confederación Española de Empresas de Tecnologías de la Información, Comunicación y Electrónica presentó hoy en León su manifiesto en el que reivindica el papel del sector en la transformación digital del país. Por ello, ofreció la «capilaridad» de las pymes para que actúen como «agentes clave» en la identificación de proyectos, capaces de conducir a las pequeñas empresas en el proceso de digitalización.
«Nos comprometemos a que la transformación digital no se trivialice y se difunda como un conocimiento transversal que si requiere de la especialización y experiencia de los y las profesionales de las empresas pyme que ya conceptualizan e implementan las soluciones tecnológicas en los distintos sectores de la economía», añade el manifiesto.
Además, el sector reclama el papel diferenciador de las asociaciones TIC, como «facilitadores digitales», y el de las empresas tecnológicas como digitalizadores. «Ambos roles están diferenciados, y son imprescindibles en las iniciativas de transformación digital que se promueven», indican.
“No podemos tener unos planes de actuación para la digitalización que no han contado con el sector tecnológico ni con los expertos y las expertas que tienen el conocimiento y la capacidad de hacerlo posible (sirva como ejemplo las Oficinas Acelera Pyme). Las manifestaciones de interés no sabemos a dónde conducen, los Consejos Consultivos sirven para presentar las propuestas elaboradas desde la Administración pero no sirven al propósito con el que se convocaron: la participación activa de los agentes económicos y sociales relevantes en la materia que ayuden en la definición de la estrategia para la Transformación Digital”, afirmó el presidente de Conetic, Tomás Castro.
«Los fondos NextGenerationEU son una buena noticia para España, y nos brindan la oportunidad de impulsar este proceso de digitalización», destaca el manifiesto, que asegura que esto requiere de la articulación de una «complicidad público-privada» para atender a las pymes, y que además cuente con las propias pymes tecnológicas como aliado clave y facilitador de esta transición. «Esta labor no se puede delegar en grandes multinacionales tecnológicas», añade.
Además, indica que la relevancia del proceso de transformación digital que España debe afrontar desde la industria, los servicios, el sector público y la sociedad en general para convertirse en un «ecosistema digital maduro» es «incuestionable», al igual que el papel que el sector tecnológico debe asumir en este proceso.
Finalmente, el texto destaca que aúna el conocimiento y la experiencia contrastada para facilitar esa transición de la economía tradicional a la economía digital de las entidades, y de las personas que las integran, para una transición rápida y sostenible.