La ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá, matizó este jueves que las competencias educativas autonómicas están «intactas» para decidir o no evaluar a los alumnos sobre los contenidos que se impartan durante este atípico tercer trimestre del curso escolar, interrumpido en su forma presencial por las medidas de confinamiento por el coronavirus.
La ley, a través de la libertad de cátedra del profesorado y la autonomía con la que cuentan los centros, precisó Celaá en una entrevista a RNE recogida por Servimedia, también permitiría que en cada colegio se aplicase una forma distinta de evaluar a los alumnos para el cierre de curso, después de que este miércoles el propio Ministerio de Educación y Formación Profesional anunciase que había acordado con las comunidades autónomas mantener la duración del curso escolar hasta junio y, sobre todo, que la evaluación será continua, la promoción de curso la norma general y que el tercer trimestre se dedicará a la recuperación, el repaso y el refuerzo.
En otra entrevista este jueves a Onda Cero, la ministra aclaró que «el aprobado general es injusto», aunque apuntó a que la evaluación debe ser «global» y centrarse en las «competencias esenciales». «El tercer trimestre no pueden servir para perjudicar al alumno», recalcó.
En ambas entrevistas, la responsable de las políticas educativas del Gobierno central agregó que los campamentos de verano este año ahondarán algo más en los contenidos. Ese refuerzo de conocimientos, dijo, no sólo se ofrecerá en verano para los alumnos más desfavorecidos por la «brecha digital» y la «social», sino que también durante el próximo curso escolar se tratará de recuperar este final de curso anómalo.
«No estamos para nada a favor del aprobado general», recalcó Celaá en una tercera entrevista a Antena 3 recogida por Servimedia. «Sería muy injusto para los alumnos», insistió, en referencia a que los estudiantes «rebajarían el nivel de autoexigencia, se relajarían» y también a quienes quieren superarse. Por todo ello, la ministra cree que debe hacerse una «evaluación positiva», aunque debe ser «el profesor que ha tratado al alumno» quien la dirima.
Así, subrayó que el tercer trimestre «puede servir para mejorar la nota final del curso y aquel que necesite recuperar materia de anteriores trimestres, podrá recuperarla». «La repetición no se impide, pero será excepcional», más en esta crisis del Covid-19. «Sería injusto que los docentes evaluaran como si nada hubiera ocurrido», zanjó.
Entre las medidas debatidas este miércoles por comunidades autónomas y Ministerio, tamién estaría que la titulación deba ser «la práctica habitual» para los alumnos de 4º de ESO y 2º de Bachillerato y FP. Respecto a las pruebas de acceso a la universidad (Evau/Ebau), la mayoría de las autonomías han retrasado su celebración a la primera semana de julio, cumpliendo con la horquilla acordada en las medidas educativas para esta crisis, para que los preuniversitarios españoles se examinen entre el 22 de junio y el 10 de julio en convocatoria ordinaria.
Precisamente, en la entrevista a Antena 3, Celaá adelantó que «si la Evau no puede ser presencial tendremos que arbitrar un plan B», aunque esa opción no estaría diseñada aún, a la espera de la evolución de las condiciones sanitarias de la pandemia.