La Segoviana sumó su segunda derrota consecutiva en Melilla (1-0) gracias a un penalti muy discutido por los jugadores gimnásticos por una supuesta mano de López. Los segovianos tuvieron poca presencia en área contraria, aunque Gómez estrelló en el palo un disparo en los compases iniciales y Rubén pudo empatar el partido en el minuto 83 con un remate de cabeza que repelió como pudo el guardameta local.

Los melillenses, que aprovecharon la delantera en el marcador para ser más conservadores buscando las transiciones, pudieron aumentar la renta en varias oportunidades por mediación de José Antonio o José Enrique, pero su falta de puntería y los aciertos de Carmona lo impidieron.

Calor y césped poco propicio

El calor y el césped seco condicionaron un partido en el que los segovianos nunca parecieron estar cómodos. Sin mucha capacidad de elaboración, solo las conducciones de Borrego y la presión de Gómez en primera línea llegaron a inquietar a un Melilla plagado de jugadores con muchos partidos en sus piernas y un oficio fuera de toda duda.

Además, y por si la derrota no fuera castigo suficiente, los gimnásticos perdieron a Astray en el primer cuarto de partido por una aparante lesión muscular. La mejor noticia del partido para los de Ramsés Gil fue la reaparición de Acuña que, después de más de un mes lesionado, regresó al equipo avanzada la segunda mitad.

Con esta derrota, la Segoviana sigue fuera de la zona de Fase de Ascenso, pero una vez más los resultados la mantienen cerca de esas posiciones de privilegio. El próximo domingo en horario matutino ante El Paso, el equipo de Ramsés Gil tiene una buena oportunidad de volver a retomar la senda del triunfo.