La Agencia de Protección Civil ha declarado la alerta por meteorología adversa ante la previsión de vientos fuertes y precipitaciones de lluvia anunciada. En caso de emergencia, hay que contactar con el 1-1-2 y explicar con la mayor precisión posible qué ocurre y la ubicación.
La Agencia de Protección Civil, dependiente de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, ha declarado la alerta por meteorología adversa ante la previsión de vientos fuertes y precipitaciones de lluvia anunciada.
Se espera una evolución desfavorable de las condiciones meteorológicas, con rachas de viento muy fuertes hasta el sábado 21 de diciembre, que podrían alcanzar los 80 kilómetros por hora en prácticamente toda la Comunidad, y con la posibilidad de que se superen los 90 e incluso los 100 kilómetros por hora en amplias zonas y, sobre todo, y de manera generalizada, en cotas más altas.
Además, se prevén lluvias generalizadas en toda la Comunidad, que serán persistentes y de mayor intensidad en los principales sistemas montañosos y en el oeste de Castilla y León.
Como consecuencia de ello, y sobre la base de los incrementos en los caudales hidrológicos de los últimos días, se podrían ocasionar desbordamientos de cauces.
La Agencia de Protección Civil, por tanto, desaconseja la práctica de actividades al aire libre en las próximas horas, en especial en las zonas de montaña, y recomienda así mismo la consulta tanto de las previsiones meteorológicas como del estado de la circulación en el caso de que se emprenda viaje por carretera. Puede hacerse a través de los portales de Meteorología https://meteorologia.jcyl.es y de Emergencias 112 https://112.jcyl.es.
Además, se recomienda la retirada de las fachadas y ventanas de los edificios de cualquier objeto que pueda ser susceptible de caer a la vía, como pueden ser tiestos, macetas o toldos, y revisar los anclajes de otros elementos (ventanas, persianas, antenas…) En el caso de transitar como peatón, es aconsejable alejarse de marquesinas, andamios o de edificios en ruinas, ya que pueden caer al suelo por el viento.
En caso de emergencia, hay que contactar con el 1-1-2 y explicar con la mayor precisión posible qué ocurre y la ubicación.