La Iglesia española ha reconocido que 435 bienes en Castilla y León pertenecen a un tercero. Alega que no le consta tener titularidad sobre ellos, faltan datos para su identificación o detecta errores.
Los datos se basan en la lista completa que el Ejecutivo remitió al Congreso de los Diputados sobre los bienes que inmatriculó entre 1998 y 2015, cifra que asciende a 32.401. De ellos, 9.438 corresponden a la Comunidad de Castilla y León, casi un tercio del total.
La Iglesia ha enviado esta lista al Gobierno para que se ponga en conocimiento de las entidades locales y de los registros, después de la reunión que mantuvo ayer el presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), cardenal Juan José Omella, con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la que también participaron el secretario general y portavoz de la CEE, Luis Argüello, y el ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños. De este modo se sella el acuerdo alcanzado en el marco de la Comisión de Inmatriculaciones que permitiría regularizar la situación de estos bienes que inmatriculó de forma extraordinaria la Iglesia y que tras un detallado análisis habría concluido que su titularidad no le corresponde, por lo que tendrá que proceder a su devolución.
Las tres comunidades que encabezan el listado son Castilla y León, Galicia y Cataluña. Por provincias, el ranking lo lideran La Coruña, Lérida, Cantabria, León y Orense.
En concreto, Castilla y León es la autonomía donde la Iglesia católica inmatriculó más bienes entre 1998 y 2015, un total de 9.438. Del total de inmatriculaciones de la Comunidad, la mayor parte se efectuaron por certificación eclesiástica.
Por diócesis, los bienes inmatriculados suman 1.201 en León; 1.806 en Burgos; 1.795 en la de Astorga, 734 en la de Zamora, 1.382 en Osma-Soria, 617 bienes en el listado de Salamanca, en 926 en Palencia, 597 en Ávila; 326 en Segovia; 218 en la de Ciudad Rodrigo, y 108 en Valladolid.
El listado incluye principalmente iglesias, templos, casas y cementerios parroquiales de los miles de pueblos de la Comunidad, sus ermitas, las catedrales, basílicas y archivos, además de otros bienes como parcelas de algún polígonos y fincas rústicas.
Tal y como explicó Argüello, el documento presentado hoy a Sánchez es el resultado de “un trabajo” que evidencia que este millar de bienes inmatriculados necesita “una revisión” del informe ofrecido por el Congreso. En el encuentro también se ha hablado del “futuro de los trabajos a realizar en materia de régimen fiscal, que ha quedado muy encauzado”, según expuso el obispo auxiliar de Valladolid.
“Todo ello, desde el subrayado de lo que la Iglesia ofrece, la radical afirmación de la dignidad humana, la apuesta de un trabajo por el bien común y lo que la oferta de sentido de vida y compañía logra ofrecer a nuestros conciudadanos, que también ha estado en la conversación y que ha sido satisfactoria”, destacó, en declaraciones recogidas por Ical.
En Castilla y León, la Iglesia ha detectado 78 bienes que pertenecen a comunidades religiosos y otras entidades, es decir, otros titulares; 231 sobre los que faltan datos para su correcta identificación, una decena que no están inmatriculados por la institución y nueve que cuentan con varios errores, entre los que predominan aquellos bienes que directamente “no existen” aunque figuren en el primer documento elaborado por el Gobierno.
Procedimiento a seguir
Ahora, el procedimiento a seguir para ese millar aproximado de bienes, 435 en Castilla y León, será que el Ejecutivo ponga en conocimiento de las entidades locales y de los registros esta información y se pueda, de este modo, iniciar los procesos de regularización que, en su caso, pudieran corresponder. A estos efectos, la Iglesia ha manifestado su compromiso de colaboración a fin de facilitar tales procesos.
Moncloa recordó que desde la reunión celebrada el pasado mes de agosto entre el ministro de la Presidencia y el de la Conferencia Episcopal Española, se han intensificado los trabajos de la Comisión ‘ad hoc’ constituida entre ambas partes dentro del diálogo entre la Iglesia y el Estado español, sobre el asunto relativo a los bienes inmatriculados por la Iglesia católica.
En este sentido, a partir del listado remitido por el Gobierno al Congreso de los Diputados en cumplimiento de la proposición no de ley de 17 de febrero de 2017 sobre los bienes inmatriculados por la Iglesia católica en el periodo 1998-2015, la Conferencia Episcopal, en el contexto del diálogo con el Gobierno, ha hecho un estudio exhaustivo del mismo a través de consultas oportunas realizadas a las diócesis. Dicho documento ha consistido en la catalogación de los bienes, su división por diócesis y verificación de los procesos de inmatriculación en cada uno de los bienes mencionados.
El análisis realizado por la Iglesia de dicho listado, en el marco de la mencionada Comisión, ha revelado un conjunto de bienes que la institución eclesiástica considera que pertenecen a un tercero o no le consta su titularidad sobre el mismo.
A estos efectos, la Iglesia manifiesta su compromiso de colaboración a fin de facilitar tales procesos. En esta primera visita del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a la sede de la Conferencia Episcopal y que ha durado una hora, el cardenal Omella le ha regalado el libro ‘Capilla de la sucesión apostólica’, así como algunos de los documentos de la CEE, además de la Memoria de actividades de la Iglesia y el texto ‘La Iglesia, Pueblo de Dios entre las naciones’.