Día grande para el pueblo de Bernardos. Hoy, tras un año de obras y mucho trabajo, se inauguraba el puente sobre el río Eresma que «permitirá la conexión de forma segura de territorios y de personas», así lo expresaba Miguel Angel de Vicente, presidente de la Diputación.
Tras la inauguración del puente, otro acto ha cobrado gran protagonismo en esta mañana de viernes. Bernardos ha recibido hoy el distintivo que declara la Subida de la Virgen del Castillo como Manifestación Tradicional de Interés Cultural Provincial, dos años después de haber sido declarada como tal.
Miguel Angel de Vicente: «Si hay alguien en esta provincia capaz de desafiar al tiempo, esos sois los habitantes de Bernardos»
Bernardos se une de esta manera al exclusivo catálogo que, hasta entonces, completaban la Ofrenda de los Cirios de Santa María la Real de Nieva, la Octava del Corpus de Fuentepelayo y El Diablillo de Sepúlveda. Y, al que este año se ha sumado Los Santos Inocentes de Juarros de Voltoya.
A pesar de que en muchas provincias es común la tradición de desplazar las imágenes religiosas, hay algo que hace especial a La Subida de la Virgen del Castillo de Bernardos, desde mediados del siglo XX se estableció que solo se realizara lo años que terminan en cero.
Mas especial es, aún si cabe, «La Subida» de este año. Puesto que al no poder celebrarse en 2020 por la pandemia, se celebrará en un año no acabado en cero
Tras la entrega del sello, el alcalde José Luis Díaz, quiso agradecer a Miguel Ángel de Vicente y a la Diputación su trabajo y dedicación, haciéndole entrega de una placa de pizarra conmemorativa del pueblo de Bernardos.
Poniendo el broche a la ceremonia con las tradicionales danzas de paloteo.