Los incendios siguieron castigando Castilla y León este miércoles, a última hora de la tarde seis permanecían en nivel dos del índice de gravedad potencial (IGR), aunque llegaron a ser siete, junto a otros tres en el uno y diez activos, con una condiciones meteorológicas marcadas por el calor, el viento y las tormentas secas que impulsaron con aún más virulencia las llamas en diversos puntos de la Comunidad, con León y Zamora como el epicentro del desastre.
El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, cifró por la mañana en alrededor de 8.200 las personas que continuaban por la ola de incendios que asola Castilla y León desde el pasado fin de semana. Sin embargo, la buena noticia llegó a última hora de la tarde cuando desde el CECOPI de Zamora se comunicó que podían regresar a sus casas a los 975 vecinos evacuados de nueve municipios de la provincia por el incendio originado el domingo en Molezuelas de la Carballeda.
Sin embargo, en la provincia de León, los vecinos de Fresno de la Valduerna, donde había 683 personas, Castrotierra de la Valduerna (186), Valle de la Valduerna (82) y Palacios de la Valduerna (353), se trasladaron a La Bañeza, donde Cruz Roja todavía tiene camas disponibles en los cuatro albergues habilitados. Estas personas se sumarán a las más de 6.000 desalojadas ya en una treintena de poblaciones entre el triángulo formado por el río Órbigo y la carretera de La Bañeza a Nogarejas. En total en la provincia permanecen desalojadas por este incendio 7.859 personas.
En la provincia leonesa también se mantuvieron en IGR 2 los fuegos de Yeres, que quemó el parque de Las Médulas, así como el de Llamas de la Cabrera, a los que se sumó también el de Anllares del Sil, dentro del término municipal de Páramo del Sil, en la comarca del Bierzo, debido a la existencia de amenaza seria a poblaciones, aunque finalmente no se decretó el desalojo.
En la provincia de Zamora, el incendio con más impacto siguió siendo el de Puercas, que mantuvo el nivel 2 de peligrosidad, prosiguiendo con su voraz marcha por el territorio zamorano, y obligando a desalojar Sesnández de Tábara.
Asimismo, en Palencia, con el mismo nivel 2, se mantuvo el incendio de Resoba. El Centro de Coordinación Operativa Integrado (CECOPI) de la provincia de Palencia levantó esta tarde el confinamiento preventivo de los municipios de Lebanza y El Campo, cuya población se mantenía en sus casas debido al riesgo por el incendio declarado el pasado domingo en Resoba.
Junto a estos fuegos, también llegó a nivel 2 otro en La Bastida, en la Sierra de Francia de Salamanca, que se dio por controlado a primera hora de la tarde.
Asimismo, se contabilizaron numerosos fuegos de nivel 1 en León, como el en Parde Sivil, Orallo y Fasgar. Junto a estos estaban activos incendios en Penches, en Burgos; Barrios de Luna, Laballos, Castrocalbón, San Feliz de las Lavanderas y Olleros de Sabero en León; El Casarito y San Cristóbal de los Mochuelos, en Salamanca; y Castromil y Portos, en Zamora.
Los desalojos
Cabe recordar que el incendio que se originó en Molezuelas de la Carballeda (Zamora) mantenía desalojados ayer los pueblos de Congosta, Villageriz, Alcubilla de Nogales, San Pedro de la Viña, Fuente Encalada y Carracedo en la provincia zamorana. Además, Ayoó de Vidriales continuaba confinado y estaban cortadas al tráfico varias carreteras provinciales. Todos los vecinos pudieron regresar a sus casas a última hora de la tarde y las carreteras fueron reabiertas.
Las llamas que pasaron desde Zamora a la provincia de León, obligaron también a desalojar por la tarde a alrededor de 3.000 personas de las localidades de Genestacio de la Vega, Quintana del Marco, Villanueva de Jamuz, Altobar de la Encomienda, San Juan de Torres, Santa Elena de Jamuz, la Nora del Río, Jiménez de Jamuz y Alija del Infantado. Se sumaron a las 300 de Herreros de Jamuz, Palacios de Jamuz, Quintanilla de Florez y Quintana y Congosto y a las cerca de 1.700 que tuvieron que abandonar anoche sus viviendas en San Félix de la Valdería (150), Pobladura de Yuso (100), Calzada de la Valdería (60), Ferechales de la Valdería (100), Pinilla de la Valdería (300), Castrocalbón (1.000) y San Esteban de Nogales (500), informa Ical.
Los nuevos evacuados fueron dirigidos a la localidad de La Bañeza, donde Cruz Roja gestiona cuatro albergues en espacios municipales cedidos por el Ayuntamiento, en los que se les proporcionó agua, alimentos y suministros esenciales.
En León, el avance del incendio forestal originado en la tarde del sábado en en localidad leonesa de Yeres, en la comarca del Bierzo, y que afecta al paraje de Las Médulas, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, obligó ayer a desalojar a unas decenas de vecinos de la localidad de Peñalba de Santiago. Por su parte, debido al incendio de Llamas de Cabrera, la población de Montes de Valdueza, Santalavilla, Llamas de Cabrera y Ferradillo continuaba evacuada.
Además de los fuegos de Yeres y Llamas de Cabrera, en León permaneció buena parte de la jornada también en nivel dos otro fuego en Paradiña, aunque bajó a nivel 1 a última hora de la tarde, y ya está dado hoy por controlado.
Asimismo, el incendio de Puercas en Zamora, también de nivel 2, provocó el lunes la evacuación de esta localidad y de Ferreruela, en una provincia con una evolución complicada de las llamas lejos su control, y ayer y se sumaron a los desalojos las localidades de Losacio, Abejera, Valer y Riofrío.
Si ya eran preocupantes los fuegos de las provincias de León y Zamora, la situación aún se complicó más al declararse el índice de gravedad potencial 2 en el incendio de Resoba, en la provincia de Palencia, que se inició el domingo, y obligó a evacuar la Abadía de Lebanza y confinar las localidades de El Campo y Lebanza.
Otro en Martín de Yeltes (Salamanca), que comenzó a las 13.30 de ayer, también alcanzó nivel 2, con un avance rápido hacia la localidad, pero que bajó a media tarde de nuevo a nivel 1, y esta mañana se dio por controlado.
Heridos críticos
Cabe recordar asimismo el lado más dramático de estos incendios, el de Abel Ramos, vicepresidente del Moto Club Bañezano, de 35 años, que perdió la vida mientras realizaba tareas como voluntario en labores de extinción del fuego que saltó a la provincia de León desde la vecina Zamora.
Asimismo, cuatro de las personas afectadas por los incendios de León y Zamora permanecían en estado crítico por quemaduras en su cuerpo, según confirmaron a Ical fuentes de la Consejería de Sanidad. Se trata de una mujer de 56 años, con el 50 por ciento de superficie corporal quemada, y un varón de 64 años, con el 35 por ciento afectado, que fueron trasladados la pasada noche a la Unidad de Quemados del Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid desde el Complejo Asistencial de Zamora; un varón de 36 años con una afectación del 50 por ciento, que también fue trasladado anoche desde el Complejo Asistencial Universitario de León; y otro hombre de 37 años que se encuentra en la UCI del Complejo Asistencial Universitario de León, con quemaduras en el 85 por ciento del cuerpo pendiente de su traslado.
Otro hombre de 80 años que fue trasladado hoy desde el Complejo Asistencial de Zamora presentaba pronóstico grave, con el 15 por ciento de superficie corporal quemada, mientras que una mujer de 77 años, atendida en la UCI del Complejo Asistencial de Zamora, estaba estable dentro de la gravedad, y otro hombre de 78 años, atendido en el Complejo Asistencial Universitario de León, presentaba quemaduras en el 17 por ciento de su cuerpo, pendiente esta mañana también de su traslado a la unidad de referencia regional, con sede en Valladolid.
Además, fueron atendidos ocho heridos de carácter leves en Atención Primaria: un varón de 27 años en el PAC Carballeda (Zamora) y siete personas en el Centro de Salud de Tábara. Y las ambulancias de Sacyl ayudo también a evacuar a 58 personas desde su localidad o residencias de ancianos a otras residencias o albergues, en colaboración con el operativo de rescate.