Segovia es una provincia asociada al coleccionismo y son muchos en la provincia los que, de manera pública o anónima, atesoran todo tipo de fetiches con más o menos valor en sus casas. La Asociación segoviana de Numismática y Coleccionismo cuenta con 80 socios y lleva en vigor desde 2009 y está presidida desde su creación por Francisco Javier García Herrero; Doctor en Ciencias de la Comunicación con la tesis: «La dimensión comunicacional de la numismática en España 1886-1939». Ejerce de profesor universitario en el Campus de la UVa en Segovia y además es propietario desde hace tan solo unos meses de la Filatelia Doblón en pleno centro de Segovia.
García reconoce que la Asociación es «poco escandalosa» y su actividad de cara al exterior se centra en ceder material para exposiciones u organizar la Feria de Numismática en la Casa de la Moneda cada año lo que » no resulta fácil»
Segovia Audaz: ¿Qué tipo de coleccionismo se hace en Segovia?
Fco. Javier García: Hay varias líneas. La principal es la que tiene que ver con Segovia. Personas a las que les da igual el producto siempre y cuando sea de aquí: libros, elementos históricos, hasta sifones… y luego hay otro nivel importante que es el de la moneda segoviana. Todas aquellas que se han hecho en la CECA siempre buscando la excelencia en la calidad. El tercer escalón más bajo aunque más numeroso es también lo relacionado con los euros conmemorativos de países hablando siempre de monedas. Luego están los sellos con los suplementos de correos y albumes y a partir de ahí cada uno tiene una sensibilidad: espadas, medallas, barajas de cartas, programas de cine, discos, juguetes, candados, dedales, muñecas, grabados…
SA: ¿Cómo es el coleccionista «tipo» de Segovia?
F.J.G.H: Es posible que no haya un coleccionismo «joven» porque no tienen los recursos suficientes aunque sí que tengan afición. El coleccionista medio en Segovia es un hombre de entre 40 a 60 años con nivel cultural alto con amor por la historia.
SA: El que colecciona, ¿por qué lo hace?
F.J.G.H: Creo que todo el mundo tiene claro qué es lo que hay que adquirir si hablamos de inversión. Otro grupo de coleccionistas pretenden, más que acaparar, poseer pequeños o grandes pedazos de historia. Hay que tener en cuenta, por ejemplo, que una misma moneda puede valer 18€ o 2.000€ según el estado de conservación por eso el coeccionista intenta muchas veces tener lo mejor dentro de sus posibilidades. En el fondo y por regla general un coleccionista no quiere revender lo que compra, salvo como digo en el caso de las inversiones.
El coleccionista curiosamente suele ser muy celoso de su intimidad y solo presume de sus colecciones ante muy pocas personas. Hacerlo público en general no es habitual por una cuestión de seguridad en primer lugar aunque no necesariamente. Para muchos coleccionar es algo íntimo y solo lo compartes si crees que a quien se lo dices o te puede ayudar, por ejemplo.
SA: ¿Y el coleccionista sabe lo que tiene?
F.J.G.H: Casi siempre, lo normal es apuntarlo todo, registrarlo todo con el precio de compra. Otra cosa es que hayas pagado de más o de menos por un producto. Quien no lo tiene tan claro son los herederos. Y para eso estamos en la Asociación también para ayudar a tasar las colecciones.
El coleccionista compra sabiendo que probablemente tenga que vender si quiere adquirir algo mejor y sufre al hacerlo porque te encariñas con lo que compras.
SA: ¿Qué colecciones curiosas hay en Segovia?
F.J.G.H: Infinidad. Sirvan como ejemplos una colección de discos de Héroes del Silencio, pero no solo los editados en España, los originales de todo lo editado en el mundo. Posiblemente, además, tengamos una de las mejores colecciones de La Guerra de las Galaxias (Star wars) de toda España y una colección muy particular de sonidos de campanas a las 12 de la mañana; coches pequeños de chapa; programas de mano de los cines de Segovia… pero lo más extraño que he visto es una colección de botijos: de todos los tamaños.
SA: ¿El mercado On-line es fiable para un coleccionista?
F.J.G.H: Intenet en el coleccionismo tiene gran parte de mito. No todo lo que está en la red se vende porque parece que el precio que pone en internet es lo que vale y no necesariamente. El coleccionista se fía de internet lo justo y asume un margen pequeño de «engaño». Se gasta poco, por regla general, en algo que no puedes tocar, pesar…
El coleccionismo es una liturgia. Es ir a la tienda o al puesto de venta, tocar las piezas, buscar las imperfecciones para regatear en la medida de los posible el precio. Empiezas a disfrutar cuando sabes que vas a ir el domingo al mercadillo. Hacerlo por internet es frío.
SA: ¿Cuál es el Santo Grial del coleccionismo segoviano?
F.J.G.H: El AS Romano por lo que se representa, las 25 milésimas de Escudo y los Reales de a 8 acuñados en la Fábrica de la moneda y a partir de ahí cada lo que cada uno coleccione. Para alguien que colecciones medallas de Segovia como yo el Santo Grial son dos medallas que aún no tengo.
Foto: Francisco Javier García Herrero en la Filatelia Doblón, establecimiento que regenta desde hace tan solo unos meses