Los comercios del casco histórico de la ciudad han vuelto a mostrar una vez más su generosidad y apoyo a la diversidad al instalar durante un mes una selección de fotografías del grupo Paladio Arte con motivo de su 20 aniversario.
Con el apoyo de Cámara Segovia, los escaparates de 42 comercios han colaborado en la iniciativa ‘Esca-para-te Paladio’, para convertir el centro de Segovia “en una sala abierta”, según el encargado del Plan de Apoyo al comercio minorista, Juan Carlos Manso.
La iniciativa es una acción de Responsabilidad Social Corporativa que realizan las tiendas segovianas a través de la entidad cameral, consiguiendo de esta manera, entre otras cosas, “dinamizar el comercio” y que los segovianos “se acerquen a los escaparates de estas tiendas”.
Tiendas de ropa, de dulces, de zapatos, deportivas, estancos, joyerías, farmacias, librerías, o de comida, han querido colaborar aportando su granito de arena, resultando una forma de que los segovianos se paren en el escaparate. “A mí no me cuesta nada, cedo un pequeño hueco y si a ellos se les hace más visibles y a mí también, todo es positivo”, explica la responsable de El Jardín, Ana Bella, una de las tiendas participantes, en la que también se han llevado folletos sobre esta iniciativa.
La exposición, que termina este jueves 14 de julio, puede contemplarse en tiendas de la calle San Francisco, Cronista Lecea y en toda la calle Real, tanto en la calle Isabel La Católica, Juan Bravo, Cervantes y la Plaza del Corpus.
La admiración por estas fotografías también fascina a los turistas, que contemplan estas fotografías que destacan por su lado humano, “porque cuando la gente la ve, pregunta y se le explica lo que es. Me parece una iniciativa muy bonita y muy interesante porque son fotos espectaculares, a mi me ha tocado la que ilustra el cartel y es un orgullo”, afirma Luis Matarranz, propietario de la Tienda Tierra de Sabor Club Selección Segovia.
Las fotografías seleccionadas han sido realizadas por Juan Carlos Gargiulo donde muestran la diversidad en el arte a través de las instantáneas, de una manera intimista, haciendo brillar a los participantes en sus “pequeñas alegrías”.