Una de las tradiciones más populares de nuestro país y algo que se ha convertido en motivo de nuestros planes es: «quedar a tomar una caña».
Aunque lo que vayamos a consumir no sea eso y, a veces, sin haber probado nunca la cerveza, de la boca de los españoles sale esa mítica frase, simplemente con la intención de reunirse con los amigos a toma algo en un bar.
Pero, este tipo de consumición es tan icónica en nuestro país que ya se ha convertido en la protagonista de las quedadas entre amigos. A pesar de ello, quizá, esta frase tenga que empezar a cambiarse porque los datos indican que «la caña» podría estar llegando a su fin en España.
Su consumo ha descendido casi un 10% y algunos bares, incluso, ya se habrían planteado eliminar esta consumición de su oferta. Antes de la pandemia el consumo se elevaba por encima del 20%, hoy apenas llega al 14%.
Bajadas y subidas
Como siempre, si algo baja otra cosa comienza a subir. Y es que el motivo del descenso en el consumo de cañas, tiene una de sus razones en que los españoles han comenzado a consumir la cerveza en vasos y copas de mayor capacidad.
Los dobles y tercios copan los registros del consumo de cerveza en España, representando casi un 80% de su consumo. A este cambio de consumo contribuyó la pandemia, cuando solo se podía consumir en terraza, donde muchos bares solo sirven dobles.
En definitiva, esto no quiere decir que el consumo de cerveza haya descendido, al contrario, ha aumentado incluso en los hogares españoles. Pero, el hábito de consumo ha sufrido un giro, pasando de los vasos de caña a las copas y pintas.
Por tanto, los grupos de amigos tendrían que cambiar su frase para las quedadas. En lugar de «quedar a tomar una caña», quizá sería más correcto «quedar a tomar una copa de cerveza».