Cuentan que Felipe V subía al cerro del Moño de la tía Andrea para contemplar las obras del Palacio Real de La Granja. En lo alto de este enclave montañoso aguarda, precisamente, la silla del Rey, un trono hecho de piedra que ofrece descanso con respaldo y reposabrazos para aquellos montañeros que deciden efectuar la subida a la cima.

La ruta para llegar a la silla del Rey tiene aproximadamente seis kilómetros, aunque hay varias alternativas de caminos, lo que alterará la longitud del recorrido. Sin embargo, independientemente del trayecto que desees realizar, tendrás al alcance de tu mirada un auténtico tesoro paisajístico, con pinares, vistas a la meseta y, si alzas la vista, sentirás Peñalara más cerca que nunca.
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La mayoría de los montañeros opta por iniciar la subida desde la Pradera de Navalhorno, en donde podrás encontrar aparcamiento cerca del Real Aserradero de Maderas de Valsaín. Comenzarás a andar por una pista de asfalto y te encontrarás con el Puente del Vado de los Tres Maderos, en donde, pasado el mismo, tendrás que tomar el camino de la izquierda. A partir de este punto, no hay pérdida: seguir la pista forestal sin desviaciones. Aunque la subida sea dura, ¡no desistas! Tu objetivo cada vez está más cerca. Cuando llegues al Alto Llano tendrás que dirigirte a la izquierda, hacia un camino de tierra que te conducirá al Moño de la tía Andrea. Por fin, a 1680 metros de altitud llegarás a tu destino.
El recorrido de ida y vuelta, con un grado de dificultad medio-alto, te llevará unas tres horas y media.
