IU Castilla y León apuntó hoy al modelo económico como responsable de la despoblación de Castilla y León y expresó su apoyo a la movilización de los pueblos participantes en las protestas contra la despoblación. Esta lucha constante, añadió, se ejerce desde sus cargos públicos y militantes en cada pueblo y comarca de forma constante, desde la fundación de la organización en 1986, así como desde otras organizaciones políticas y sociales, informa Ical.

En un comunicado, IUCyL valoró que el modelo económico asignado, es el principal problema para el desarrollo social y demográfico de la Comunidad, condenada según la formación a proyectos residuales, explotación de sus recursos, instalación de macrogranjas y desmontaje de industrias y otras actividades de alto valor añadido. «Se traduce en un proyecto residual del capitalismo para Castilla y León, tan sumisamente aceptado por los poderes políticos y económicos de nuestra Comunidad», agregó.

Asimismo, aseguró que un cúmulo de proyectos negativos social, política y medioambientalmente, lo atestiguan, como son a su juicio los macroproyectos mineros en Salamanca y Ávila, las «ineficaces» gestiones de residuos y plantas de compostaje, y la «alarmante proliferación» de macrogranjas (como el proyecto de Noviercas), algunas de las cuales se han planteado en la Comunidad, tras el rechazo social, político y ambiental en otras.

Por otro lado, puso de manifiesto la ausencia de respuesta «eficaz» al final de la explotación minera en León y Palencia y al cierre de instalaciones como la central nuclear de Santa María de Garoña, para ofrecer una alternativa viable. Además, señaló que la deslocalización de la escasa industria local, y la «deficiente» gestión y carga de trabajo, comprometen miles de trabajos directos e indirectos.

«La falta de vertebración del territorio, malas comunicaciones tanto de transporte como digitales, y el deterioro de los servicios públicos de todo tipo (sanidad, educación, servicios sociales o bancarios por poner algunos ejemplos), en nuestros pueblos, aceleran su abandono por desatención de las necesidades de la población. Este modelo que ha sido la propuesta de los distintos gobiernos del PP en la Junta y que continua en el actual de PP y Ciudadanos, se demuestra incapaz, y agravado por la crisis del COVID-19», concluyó.