El Ayuntamiento de Segovia reabrirá los mercados al aire libre este jueves, tras la entrada en vigor de la fase 1, en su escenario habitual, en la Plaza Mayor. En esta nueva fase se dará prioridad únicamente a los productos alimentarios y de primera necesidad, con la garantía de que no exista ninguna manipulación de los productos comercializados por parte de los consumidores.

Desde el consistorio remarcaron que se asegurarán los requisitos de distanciamiento entre puestos, con un mínimo de cuatro metros, así como las condiciones de delimitación de cada mercado, con el objetivo de garantizar la seguridad y distancia entre trabajadores, clientes y viandantes. El mercado de la Plaza Mayor dispondrá de nueve puestos con una distancia de seis metros con las terrazas y en forma de ‘L’. La misma distribución que tendrá el mercado de los lunes en el barrio de Nueva Segovia, con cuatro puestos

En cuanto al mercado de los martes, en la calle Berlín del barrio de San José, contará con siete puestos en línea, mientras que el de los sábados tendrá 13 puesos y se instalará temporalmente en la calle Campo Azálvaro, junto a la Plaza de Toros, para evitar que los vecinos tengan que salir a retirar los vehículos estacionados en la ubicación habitual del mercado, favoreciendo así la seguridad sanitaria y se aumentará la superficie habilitada para el ejercicio de la actividad.

Los mercados estarán delimitados con vallas o con cualquier otro medio que permita marcar de forma clara los límites del espacio, de forma que se pueda controlar la entrada y salida de gente evitando las aglomeraciones. Cada puesto tendrá a la vista carteles informativos sobre las medidas organizativas y de higiene y se garantizará la limpieza inicial y final de la vía pública en los espacios de estos mercados, y se instalarán contenedores para que los vendedores depositen materia orgánica desechable, cajas y envases.

Normas para vendedores

El horario de funcionamiento de los mercados será de 8.30 a 14.00 horas. Dentro de un mismo puesto, las personas vendedoras deberán guardar entre sí una distancia mínima de dos metros, quedando restringida la actividad comercial a un único operador en caso de que las medidas del puesto no hagan posible esta separación física. La distancia entre vendedor y cliente será de al menos un metro cuando se cuente con elementos de protección o barreras, o de aproximadamente dos metros sin estos elementos.

Únicamente los vendedores podrán tocar los productos, siempre con guantes de protección y mascarilla, y siguiendo las instrucciones y recomendaciones de higiene frente al COVID-19, así como evitar la manipulación simultánea de alimentos y dinero u otros medios de pago, fomentando el pago por tarjeta y extremando la limpieza del TPV tras cada uso.

Los puestos de venta deben ser limpiados y desinfectados con frecuencia, junto con toda la maquinaria, dispositivos y otros elementos del puesto ambulante, teniendo en cuenta las superficies que hayan podido ser tocadas. No se podrá poner a disposición de los clientes productos de prueba, y deberán desinfectarse frecuentemente los vehículos de carga.

Otras medidas que deben cumplir son: disponer de gel hidroalcohólico, pañuelos desechables y papeleras con tapa y bolsa, preferiblemente con pedal o basculante, para depositar residuos y material desechable. Si un trabajador empezara a tener síntomas compatibles con la enfermedad, se contactará de inmediato con el teléfono habilitado y deber abandonar su puesto de trabajo hasta que su situación médica sea valorada por un profesional sanitario.

Normas para clientes

En cuanto a los clientes es obligatorio el uso de mascarillas y guantes y tendrá preferencia de atención a grupos de riesgo como mayores, discapacitados o embarazadas. El tiempo de permanencia en los mercados será el estrictamente necesario para realizar sus compras o recibir la prestación del servicio, recomendando la asistencia de una persona por familia.

Además se debe de mantener la distancia de seguridad interpersonal de dos metros entre clientes; no no está permitida la manipulación directa de ningún producto salvo por el trabajador del puesto; nos se puede aceptar productos de prueba y se recomienda pagar con tarjeta.