El próximo martes será el último día en que el público general pueda visitar el castillo de Turégano hasta la finalización de las obras de adecuación y mejora de accesos del conjunto.
Dichas obras son posibles gracias a la subvención del 1,5% Cultural del Mitma concedida en 2019, además de las ayudas de la Junta de Castilla y León y la Diputación Provincial de Segovia. Aún no se conoce con exactitud la fecha de inicio, aunque se espera para los primeros meses del año 2021, y su plazo de ejecución puede prolongarse al menos dos años desde su inicio. Con ellas se mejorarán los accesos al conjunto y a diferentes espacios como la iglesia, además de crearse nuevos recorridos por el castillo y la cerca perimetral más próxima al edificio, haciendo que la parte visitable sea aún mayor.
El conjunto, propiedad del obispo de Segovia, aunque actualmente cedido al ayuntamiento de Turégano, fue declarado monumento histórico artístico en 1931. Su origen está en la iglesia románica de San Miguel, de la segunda mitad del siglo XII y sin parangón en la provincia de Segovia. Sobre ella se van asentando una serie de encastillamientos que culminan con el castillo de finales del siglo XV que vemos a día de hoy y que debemos en buena medida al obispo Juan Arias Dávila, desterrado de Segovia por el rey Enrique IV en 1968 y asentado en la villa de Turégano, cabeza del extenso señorío episcopal que ocupaba buena parte de la zona central de la provincia. Su construcción a lo largo de los siglos es muy compleja y aún está cargada de incógnitas que a día de hoy los investigadores siguen desentrañando a través de recientes estudios. El hecho de que este castillo no haya tenido uso desde el siglo XVII ha propiciado que se conserve su estructura original, lo que le convierte en un espacio único.
Actualmente el castillo puede visitarse hasta el día 5 de enero a través de visitas guiadas que deben concertarse previamente a través del teléfono 634460215.