El Batallón de Intervención en Emergencias V de la Unidad Militar de Emergencias ha realizado más de 800 actuaciones en distintos centros de Castilla y León, de las que más de 600 fueron desinfecciones en residencias. De igual forma, el BIEM V desarrolló un total de 80 intervenciones en Asturias y acudió en seis ocasiones a Cantabria, donde permaneció una media de dos días cada vez, para desinfectar diferentes espacios públicos y privados.
Así lo apuntaron hoy los delegados del Gobierno en Castilla y León, Javier Izquierdo, Asturias, Delia Losa, y Cantabria, Ainoa Quiñones, durante su visita a las instalaciones del BIEM V de la UME en la Base Conde de Gazola, del Ejército de Tierra, situada en Ferral del Bernesga (León), donde mostraron su agradecimiento al batallón por la intervención en cuatro comunidades autónomas, como son Galicia, Asturias, Castilla y León y Cantabria, y “toda su actuación durante el coronavirus”, en la que “han dado un ejemplo de profesionalidad, entrega, servicio a la ciudadanía y de estar en los lugares más duros y complejos y atender con total dedicación y sin ningún tipo de impedimento”.
Para Javier Izquierdo, esta actuación del BIEM V de la UME durante la situación de emergencia sanitaria pone de manifiesto “el valor de las fuerzas armadas en su conjunto”, ya que además de las actuaciones en residencia y distintos centros, el delegado puso de relieve “todos los protocolos que hemos sido capaces de desarrollar con la Junta de Castilla y León, en materia de cómo priorizar las intervenciones en residencias y con medidas que también tienen que ver con la formación”.
Así, tal y como señaló el delegado del Gobierno, durante la pandemia ha habido formación a otros servidores públicos como Bomberos, Policías Locales u Organizaciones Profesionales Agrarias “para incrementar la capacidad de desinfección”. Por otra parte, en estos momentos, la UME lleva a cabo una actuación formativa destinada a los gerentes de las residencias de mayores para “en caso de posibles rebrotes saber afrontar mejor la gestión de los espacios y su desinfección y evitar que el virus tenga un efecto como el que ha tenido en la pandemia”.
Sin embargo, Izquierdo expuso que, “después de que la UME se retirara en las últimas semanas del COVID para dejar entrada a otras unidades de las fuerzas armadas, entre ellas el MACA de León”, ahora pone su vista en la campaña de incendios, para la que la Unidad “lleva tiempo preparándose para afrontar uno de los grandes problemas que pone de manifiesto la importancia del sistema de protección civil que tiene el Estado”.
La delegada del Gobierno en Asturias, Delia Losa, aseguró que “en Asturias no se entiende ya cualquier tipo de actuación relacionada con las emergencias sin la UME”, que “desde que fue creada desarrolla unas funciones imprescindibles para el mantenimiento de la seguridad de España”.
En el caso concreto de la crisis sanitaria, Losa apuntó que desarrolló más de 80 actuaciones en espacios públicos y privados, lo que manifiesta “la importancia de lo público y su eficacia desde el momento cero, lo que desmonta el mito de que lo público no funciona”
Por su parte, la delegada del Gobierno en Cantabria, Ainoa Quiñones, afirmó que “nada habría sido igual durante la pandemia sin el esfuerzo, tesón y trabajo incansable de la UME”, de los que aseguró que “más allá de unos meros servidores públicos, en muchas ocasiones han sido garantes de mantener la paz social que la ciudadanía demandaba”.
En el caso concreto de Cantabria, la UME acudió en seis ocasiones durante el estado de alarma, con unos dos días de media, desinfectando punto públicos y privados y “llevando a cabo un trabajo incansable e incalculabre”.