La Policía Nacional detuvo en la provincia de Segovia a cuatro personas que explotaban sexualmente a mujeres procedentes de Venezuela y Colombia. Una de las tres víctimas liberadas fue captada por un amigo que le puso en contacto con una mujer venezolana que ejercía de enlace para traer chicas a España y que se encontraba en Bogotá (Colombia). Las mujeres engañadas debían pagar a la red una cantidad que rondaba los 3.500 euros y eran amenazadas con trasladar dicha deuda a sus familiares si se negaban a prostituirse.
Según informaron fuentes policiales, la investigación comenzó con la denuncia de una mujer que fue captada en Colombia por un amigo que le comentó la existencia de una mujer que facilitaba la llegada de mujeres colombianas y venezolanas. Para ello debía contactar primero con otra mujer que actuaba de enlace y que se encontraba en Bogotá (Colombia). Una vez que se puso en contacto con esta mujer le informó de que vendría a España a trabajar obteniendo más ingresos que en Colombia, explicándole todo los aspectos y las condiciones del viaje.
La víctima aceptó lo que a priori se le planteó, por lo que a mediados de 2018 llegó a nuestro país por vía aérea. Una vez en Madrid, la mujer que ejercía como enlace le explicó que debía pagar 3.500 euros como deuda, dinero que abonaría periódicamente hasta saldar totalmente la deuda mediante el ejercicio de la prostitución en un club de la provincia de Segovia. En este club permaneció unas dos semanas junto a otra mujer traficada previamente por el mismo grupo criminal.
Las dos mujeres se reunieron con la líder de la red manteniendo una fuerte discusión sobre las condiciones padecidas y la deuda que habían contraído, ya que no eran las condiciones pactadas. Otra de las víctimas relató a los agentes que le ofrecieron un trabajo en una peluquería, sin embargo una vez en su destino le comunicaron que ejercería la prostitución y que pagaría una deuda no de 1.000 euros como pactaron antes de emprender el viaje, si no que ascendía a 2.500 euros.
Las dos víctimas fueron amenazadas con asiduidad cuando planteaban no seguir pagando la deuda, incluso la mujer que actuó de enlace en Colombia les hizo saber que en el caso de que no siguieran pagando, ella sabría cómo cobrárselo, amenazando también con «cobrárselo» a sus familiares que permanecían en Venezuela. Las dos mujeres fueron llevadas a otro club donde permanecieron cinco días hasta que una de ellas decidió irse y denunciar la situación.
La investigación policial permitió la detención de cuatro personas, entre ellas la principal líder de la red y su pareja sentimental así como el dueño y el encargado de uno de los clubes donde eran prostituidas las mujeres. Tras dos registros realizados en un domicilio particular y en un club de la provincia de Segovia, intervinieron 2.775 euros en efectivo, diversa documentación relacionada con las víctimas, contabilidad del pago de las deudas así como material informático y terminales móviles.