La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) denunció ante el Juzgado de lo Social el despido de dos interinas y la posterior amortización de sus puestos en la Diputación Provincial de Segovia, concretamente en el Área de Deportes, para después contratar a tres personas en esa misma área: un auxiliar administrativo, un técnico superior en Enseñanza y Animación Socio-deportiva y un tercer puesto cuya titulación no ha sido precisada, informa Ical.
Para CSIF, esta actuación “supone un atropello a los derechos de las dos trabajadoras despedidas”, por lo que el caso ha sido denunciado ya ante el Juzgado de lo Social de Segovia y le sorprende que, en ningún momento, se haya contado con las dos trabajadoras despedidas o que, paradójicamente, el motivo de esos ceses fuera la falta de carga de trabajo en esa unidad de deportes, según argumentó el equipo de Gobierno de la entidad provincial.
Para CSIF, “estamos hablando de dos personas que venían realizando sus funciones desde hacía casi una década, y a las que se ha despedido de la noche a la mañana con una excusa que no se sostiene” porque luego se contrata a tres personas para la misma área, luego “la carga de trabajo existe”.
Las nuevas contrataciones se producen a través de subvenciones del programa Covel, promovido por la Consejería de Empleo e Industria de la Junta, con el doble objetivo de reducir el desempleo y colaborar con diputaciones y ayuntamientos en la prestación de servicios básicos que sean de su competencia, en especial, aquellos que tengan que ver con las necesidades y la protección social de personas y colectivos más afectados por la crisis económica y sanitaria, explica CSIF.
El sindicato consideró que las nuevas contrataciones, a través de los fondos Covel, son contrarias a los objetivos del propio programa. “No parece que los trabajos que realizaban las antiguas trabajadoras y que ahora hacen las tres personas que se han incorporado, para reemplazarlas en sus funciones, correspondan a la prestación de servicios básicos, ni vayan asociados a la protección social de personas afectadas por la crisis derivada de la pandemia”, argumentó CSIF.
En su opinión, se podría haber mantenido perfectamente a las dos personas despedidas, con amplia experiencia además en su trabajo, y haber aprovechado los fondos para contratar personal para otras áreas en las que contribuirían, de verdad, a ayudar a aquellas personas o sectores más castigados por las consecuencias del COVID-19.