El Ayuntamiento de Segovia recordó hoy que está “totalmente prohibido manipular los árboles de la ciudad para conseguir sus frutos”, y que la ordenanza de Parques y Jardines contempla multas de entre 30 y 3.000 euros por causarles daños, aparte de posibles indemnizaciones. Una advertencia que lanzó ante la proliferación de ciudadanos, “sobre todo” personas mayores, que “están convirtiendo en práctica habitual” golpear las ramas “con palos, pértigas o cualquier utensilio para que caigan almendras o nueces”.
En concreto, la normativa “prohíbe, con carácter general, manipular las plantas aunque no se les produzca daño alguno”, matizaron fuentes municipales a través de un comunicado. Las infracciones leves pueden sancionarse como mínimo con 30 euros de multa y, “cuando esa manipulación supone lesionar cualquiera de sus partes (raíces, tronco, ramas, hojas o flores) se puede sancionar con multas económicas que pueden llegar a los 3.000 euros en función de la gravedad”.
Además, el Consistorio puede reclamar al infractor la correspondiente indemnización por el daño causado a un bien municipal, y “los árboles son bienes que pueden alcanzar un elevado valor patrimonial”, añadieron las mismas fuentes. En este sentido, el golpeo con palos, pértigas o cualquier utensilio para que caigan los frutos “produce en muchos casos daños en los árboles, provocando la rotura de ramas o descortezados que les perjudican”.
“No hay inconveniente en que se recojan los frutos caídos, pero nunca se pueden forzar los frutos para que se desprendan de las ramas, como tampoco está permitido subir al árbol para recolectarlos”. Asimismo, “excepcionalmente y con fines científicos”, el Consistorio matizó que sí autoriza el acceso a los árboles “a personal especializado con los medios adecuados y las precauciones debidas” para no causar daños.