El sector de Actividades Sanitarias y Servicios Sociales destruyó un total de 11.325 empleos a lo largo de los meses de enero y febrero (-9.547 en enero y -1.778 empleos en febrero), según datos de la Seguridad Social extraídos por la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF).
Para CSIF, sindicato más representativo en las administraciones públicas y con presencia creciente en el sector privado, resulta indignante que se haya prescindido de efectivos durante dos meses consecutivos, de los peores meses de la pandemia, en los que se volvieron a disparar los contagios, la presión hospitalaria, con las UCI al límite y la segunda cifra más alta de fallecidos en lo que va de crisis sanitaria.
La pérdida de empleos también ha coincidido con el inicio de la campaña de vacunación. Se da la circunstancia de que se ha iniciado la vacunación masiva en grandes espacios, mientras que la situación de la Atención Primaria sigue estancada y sumida en la precariedad en la atención. A pesar de ello, los profesionales de atención primaria están vacunando a los grupos vulnerables que marca el Ministerio (mayores de 80 años) con las máximas garantías, pese a la escasez de medios, como hemos advertido desde CSIF durante todos estos meses.
CSIF critica al Ministerio de Sanidad porque aún no ha puesto en marcha las mesas de negociación para abordar diferentes problemas que afectan a este sector, como es el caso de las plantillas y la temporalidad.
La gestión de Sanidad durante la pandemia, ha estado marcada por los problemas de coordinación con el resto de administraciones. La nueva ministra debe reactivar el diálogo social tras un año de parón y urge un refuerzo de plantillas y una planificación de los recursos.
CSIF ha presentado un plan de refuerzo para el conjunto de las administraciones públicas para reforzarlas con 106.000 empleos nuevos en los próximos 3 años. La Sanidad, en concreto, requiere un plan adicional con 289.235 nuevas plazas entre 2021-2031 para equipararnos a la media de la Unión Europea.
España cuenta con 3 camas de hospital por cada mil habitantes, frente a las 5 de la media UE o las 8 de Alemania, con lo que conlleva de personal. La sanidad tiene un problema de personal estructural, tanto de médicos como de Enfermería, de tal manera que se han tenido que adoptar medidas como la contratación de médicos extracomunitarios sin título homologado, estudiantes en el último año de grado o la movilidad forzosa.
Temporalidad en las administraciones públicas
Según los últimos datos de la EPA, las administraciones públicas registran la mayor cifra de temporalidad de la serie histórica. En el último trimestre del año se registraron 1.011.500 personas asalariadas con contrato temporal (se supera por primera vez en la historia el millón de personas), 106.200 más respecto al año pasado. Así, la tasa de temporalidad se sitúa en el 29,9 por ciento, frente al 20,7 por ciento general.
CSIF advierte de que las necesidades estructurales de personal en diferentes ámbitos hacen que las administraciones públicas afronten la pandemia con empleo precario. De hecho, según la Seguridad Social, en el último año se produjo un récord histórico con 163.634 incorporaciones, por lo que la inmensa mayoría responde a los citados contratos temporales.