El delegado del Gobierno en Castilla y León, Javier Izquierdo, explicó hoy personal de las nueve subdelegaciones intervendrán en las labores de control en la llegada de las vacunas a las provincias para comprobar que “se reciben y están en las condiciones que tienen que estar”, siempre en colaboración y coordinación con la Junta de Castilla y León, junto a Guardia Civil y la Policía Nacional.
Javier Izquierdo remarcó la importancia del proceso de vacunación y apeló a la cautela para que el desarrollo de todo este proceso se haga con la máxima normalidad. “Los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado harán su labor de la manera habitual muy positiva y muy buena lo que va a permitir que las vacunas puedan llegar sin incidentes y se puedan empezar a dispensar cuándo la Junta determine que se haga”, resumió el delegado del Gobierno en Castilla y León.
Izquierdo recordó que la coordinación del dispositivo de las vacunas contra el COVID-19 recae en el Ministerio del Interior, para que las dosis lleguen a los puntos de destino definidos por la Junta de Castilla y León. La coordinación tiene un carácter estatal porque el tráfico y tránsito de las vacunas afectan a más de una comunidad. A través de la Secretaría de Estado de Seguridad se lleva a cabo la labor de control de la llegada de las vacunas a cada provincia de Castilla y León, contando con los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, el personal de las subdelegaciones y la Junta.