Correos instalará en sus oficinas de Castilla y León 110 cajeros automáticos, de los que 60 se ubicarán el localidades menores de 3.000 habitantes, principalmente de las provincias de Soria, Palencia y Ávila, según confirmó hoy el presidente de la compañía pública, Juan Manuel Serrano, quien destacó que se trata de una de las medidas puestas en marcha por Correos para luchar contra la despoblación e implantar servicios donde se necesitan.
Serrano, que esta mañana compareció junto al delegado del Gobierno, Javier Izquierdo, también anunció que dentro de la vocación de Correos de prestar servicios que ayuden a fijar población, también ha dotado a los 683 carteros rurales que trabajan en la Comunidad de PDA, terminales que permiten ofrecer los mismos servicios que las oficinas urbanas de la compañía.
Aunque matizó que este servicio se está desarrollando de forma progresiva, explicó que gracias a estas PDA los habitantes de cualquier municipio podrán pagar recibos o sacar billetes de tren.
La instalación de los cajeros, para lo que Correos ha licitado el alquiler de una parte de sus oficinas, se realizará en dos fases. Primero se instalarán cincuenta en oficinas y localidades rurales. En este caso, Valladolid será la provincia más beneficiada con doce nuevos cajeros, por delante de Salamanca, con diez y de León, con siete. Además, en Burgos se colocarán siete, cuatro en Zamora, tres en Ávila, dos en Palencia y uno en Soria. Después, en una segunda fase, se acometerá la instalación de los sesenta cajeros de las localidades menores de 3.000 habitantes.
La colocación de estos cajeros, según explicó Serrano, forma parte de un proyecto nacional por el que Correos pretende instalar 1.500 en toda España, de los 1.200 irán a oficinas de la compañía y el resto a zonas rurales.
Al mismo tiempo, también apuntó que la compañía trabaja en la conexión telemática de las 204 oficinas que tiene en el entorno rural, para que puedan ofertar servicios como el pago de tributos municipales, la remisión de documentación a través del ORVE o la realización de trámites de la DGT.
Por otra parte, Serrano explicó que la ubicación de los cajeros que se instalarán en los pequeños pueblos se decidirá en función de las necesidades de la población, por lo que reclamó la colaboración de las administraciones para decidir cuál es la mejor ubicación. Además, también explicó que las posibles comisiones que cobren los bancos por utilizar estos cajeros serán las mismas que en cualquier ciudad.