Comisiones Obreras de Castilla y León destacó hoy que llevan atendidas más de 2.000 consultas de profesionales de la salud por presuntas irregularidades laborales o vulneraciones de derechos laborales desde el inicio de la crisis provocada por el Covid-19. Se trata de personas trabajadoras del sistema público de salud de Castilla y León (Sacyl), clínicas privadas y residencias de la tercera edad que ven vulnerados sus derechos y realizan consultas, fundamentalmente, vinculadas con la prevención de riesgos laborales.
“La mayor parte de estos profesiones no se sienten héroes en el desempeño de su tarea. Lo único que demandan es poder hacer su trabajo perfectamente protegidas, no como por desgracia está ocurriendo. Las cifras de contagiados por coronavirus en estos sectores avalan esta demanda”, apuntan desde la Federación.
Para el sindicato, desde la declaración del estado de alarma “se ha puesto de manifiesto la falta de previsión, organización y protocolos a la hora abordar la situación, en un sistema sanitario y de dependencia muy recortados, y con profesionales quemados”. En un comunicado recogido por Ical denuncian que las autoridades “han relegado a un segundo plano la seguridad de los profesionales que atienden la sanidad y el sector sociosanitario, lo que está conllevando un altísimo porcentaje de contagiados o en aislamiento con la consecuente carencia de personal y recursos humanos disponibles para poder prestar la asistencia en Castilla y León”, una situación que, a su juicio, “se incrementa diariamente”.