La consejera de Sanidad, Verónica Casado, volvió a recomendar hoy el autoconfinamiento de la población y la salidas de los domicilios solo en casos de necesidad básica ante el aumento “vertiginoso” de los contagios en esta tercera ola.
Durante una rueda de prensa telemática en la que informó de las restricciones a partir de mañana en todas las provincias, que vuelven a “la casilla” del mes de noviembre, Casado insistió en que se limite la actividad social para “frenar” la velocidad de contagio del virus, superior a la segunda ola.
La consejera, que agradeció el trabajo de sanitarios que han suplido turnos de manera voluntaria o han doblado turnos por el temporal, manifestó que en la semana de Navidad los datos eran “magníficos” y subrayó que ha sido a partir del 30 y 31 de diciembre y 1 de enero cuando se ha producido un cambio de la tendencia.
Además aprovechó su comparecencia para facilitar una serie de datos como que esta semana han empeorado los datos en España con una incidencia acumulada de 435 casos por 100.000 habitantes en 14 días y en Castilla y León es de 443,13, cuando hace pocos días se estaba por debajo de la media nacional, pero ahora la Comunidad es la octava en incidencia a 14 días y la séptima a los siete días.
Hasta finales año la tendencia era decreciente día a día, pero los últimos días del año se produce el cambio, indicó que pensaron que era “un diente de sierra” que sucede en las predicciones de las incidencias pero han visto como ha subido día a día el porcentaje.
La semana pasada Castilla y León tenía una tasa de 285,3 casos por 100.000 habitantes a siete días, cuando en la anterior era de 125,32, una tasa cinco veces superior a la semana correspondiente a la Navidad. Tras ese dato, recordó que en la semana 42 de la pandemia, con los mismos porcentajes, en la siguiente semana se superaron los 500 casos por 100.000 habitantes.
A día de hoy la incidencia acumulada es de 323 casos por 100.000 habitantes en siete días, cuando el corte es en los 200, y de 469 en los últimos 14 días, por lo que la consejera habló de un “contagio vertiginoso” que obliga a tomar medidas más restrictivas.
Todas las provincias superan hoy los 200 casos por 100.000 habitantes a siete días, excepto Burgos, que está en 196, pero Casado manifestó que la superará en los próximos días y que todas están en nivel 4.
Tras la “incidencia bastante razonable” del 24 de diciembre se ha pasado a una situación “bastante compleja”, con datos a siete días de 496 en Ávila, 466 en León, 391 en Palencia, 306 en Salamanca, 643 en Segovia, 214 en Soria, 359 en Valladolid y 200 en Zamora.
Después de facilitar estos datos, Casado reiteró la necesidad del autoconfinamiento y de limitar la movilidad solo para salir a compras básicas o el trabajo como la fórmula más efectiva para frenar al virus, igual que se hizo en las dos olas anteriores, así como seguir las “seis emes”.
Por otro lado, alertó, conforme a información de los coordinadores clínicos, de que muchos pacientes que ingresan van directamente a las unidades de críticos en lo que consideró que se han podido contener síntomas ante de acudir al centro de salud, por lo que solicitó que ante el menor indicio se pida cita con el médico.
También, afirmó que el perfil de las personas contagiadas ha aumentado en la franja de edad entre los 20 y 40 años, que no se produjo en las anteriores, y reiteró que la velocidad en el contagio en esta tercera es superior a la segunda y se acerca más a lo ocurrido en la primera.
Finalmente, Casado, sin tener una “bola de cristal” de cuando se puede llegar al pico, manifestó que espera un empeoramiento en la próxima semana para empezar a descender después por el efecto de las medidas que entran en vigor mañana.