La Junta de Castilla y León descarta en este momento suministrar mascarillas de modo gratuito a la población, ya que su prioridad pasa por contar con stock sufienciete para atender la demanda de los profesionales sanitarios y sociosanitarios. «No puede volver a ocurrir lo que ocurrió las primeras semanas», cuando hubo desabastecimiento de equipos de protección individual entre los profesionales, y el sistema debe estar preparado para afrontar un nuevo brote si lo hubiese.

«Hay material en el mercado a buen precio, y en este momento no está entre las prioridades saanistarias», concretó el portavoz y vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, al término de la reunión del Consejo de Gobierno de hoy. En todo caso, la consejera de Sanidad, Verónica Casado, que compareció junto al consejero de la Transparencia, recordó que «el mejor guante es la higiene de manos, y la mejor mascarilla la distancia social de dos metros».

Casado, que recordó que hoy jueves entra en vigor la norma que obliga a utilizar a los mayores de seis años la mascarilla en espacios públicos donde no se pueda mantener la distancia de seguridad, insistió en la necesidad de un uso adecuado, y que siempre es complementaria a la higiene respiratoria, lavado de manos y distancia social. Lo que ha logrado tumbar una curva «casi vertical» ha sido la distancia social, que permite ahora aliviar la cuarentena, pero «la mascarilla no sirve de nada» sin las otras medidas, y si no se utiliza de manera adecuada, como «llevándola en la cabeza o en la oreja».

«El uso que debemos hacer es el adecuado, y es complementario», incidió, para reiterar que esta «semana es crucial», en la que se dará un paso en la desescalada, y eso impone continuar con la prudencia. «Desde este Gobierno siempre hemos apostado por la prudencia, y esta semana es especialmente importante. Actividades que no hemos hecho, hagámoslas con prudencia. La situación epidemiológica y sanitaria lo permite, pero no lo podemos estropear. Y esto no es la labor de un gobierno, de una consejería, de un ayuntamiento, es una labor de todos y cada uno de nosotros», sentenció.

Al respecto, el vicepresidente también incidió en ese mensaje a la prudencia con las nuevas actividades que abre la fase 1, como visitar a los mayores. A su juicio, «el momento llegará, pero no es ahora», «pensando en que queremos que nos duren mucho nuestras madres», dijo, para explicar que lo importante es «preservar la salud» de los mayores, que son los más vulnerables.