El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, anunció hoy que se aprobará mañana la regulación autonómica de la nueva normalidad, tras el estado de alarma, que comienza el lunes, 22 de julio, y que destacó servirá también para proteger a la población en esta etapa, tras completarse la desescalada derivada de la pandemia del coronavirus.
En una entrevista en el programa ‘Hoy por Hoy’ de la Cadena SER, Fernández Mañueco aseguró que hay que insistir en la responsabilidad colectiva, pero también individual, una vez que se va a permitir la movilidad entre provincias. Por ello, remarcó que el “virus sigue” entre la población y destacó las medidas universales de protección, como el uso de mascarillas, el lavado de mano o la distancia de seguridad.
“Que la gente no se piense que el domingo se acaba el virus, se abren las puertas y se genera la nueva normalidad”, dijo, al tiempo que señaló que en las dos residencias de Valladolid, donde se han producido brotes, la situación está “controlada” tras realizarse pruebas PCR y adoptar medidas “restrictivas” para el control de la movilidad interna en estos centros. Además, pidió que se mantenga la distancia de seguridad, “más allá de la cercanía a los seres queridos”.
Igualmente, Fernández Mañueco defendió que la sociedad debe afrontar a partir del domingo el final del estado de alarma para lo que recordó el Gobierno ha aprobado ya el Decreto-Ley de medidas universales para la nueva normalidad. “Se ha dicho mucho”, afirmó en relación a esta medida adoptada para luchar contra el COVID-19, pero insistió en que España tiene que dar “ya” el paso, desde la “responsabilidad individual”. “La mejor mascarilla es la distancia social”, apostilló.
El también presidente del PP de Castilla y León aseguró que su partido ha apoyado de forma “incondicional” cuatro o cinco prórrogas del Estado de alarma con su voto afirmativo o su abstención. “Hemos ido evolucionado”, dijo y aseguró sentirse ahora “más tranquilo”, una vez que Castilla y León ha optado por la prudencia y la seguridad sanitaria, como mejor forma de garantizar el máximo impulso de la economía y para proteger a las personas más vulnerables.
Finalmente, el presidente de la Junta recordó que a mediados de marzo Castilla y León tenía la incidencia más alta, algo que vinculó a la “movilidad”, mientras que ahora la Comunidad -dijo- es la décima Comunidad con mayor impacto del coronavirus. “Esa postura de prudencia y seguridad ha hecho que en estos momentos Castilla y León pueda afrontar la nueva normalidad en condiciones mucho mejores que hace tres meses”, concluyó.