Cáritas Española se une a la celebración del Día Internacional de los Voluntarios el 5 de diciembre, y agradece a todos sus colaboradores su papel callado y poco visible que hace posible mantener encendida la frágil llama de la esperanza en muchos hogares heridos por la exclusión social o la pobreza.
El voluntariado es la gran riqueza de Cáritas, pero también de toda la población española. Su entrega gratuita y generosa surge de una sociedad, que sigue considerando la acogida y la apertura a los demás como un valor que orienta nuestras vidas.
Cáritas cuenta en la actualidad con 72.447 personas voluntarias y en Segovia, son 245 las que colaboran y ayudan en los programas de ayuda y acompañamiento que se desarrollan en la provincia. De ese total, dos de cada tres son mujeres y la mitad tienen entre 45 y 64 años. La fuerte opción evangélica de la mayoría de las personas voluntarias explica su larga trayectoria dentro de nuestra organización, ya que uno de cada dos lleva más de seis años.
Para celebrar este día, Cáritas Segovia reunió la tarde del 4 de Diciembre a un buen número de voluntarios en una jornada que sirvió para compartir experiencias, prestarse apoyo mutuo y pasar una agradable velada llena de sorpresas.
La razón de ser del voluntariado de Cáritas es el servicio. Así lo viven a diario “estos vecinos de la puerta de al lado” que, como asegura el Papa Francisco, dedican su tiempo a atender a los que más lo necesitan.
Chantal Fokkelman es voluntaria de Cáritas Segovia en el programa de empleo y formación, y asegura que ser voluntaria “es una forma de vida”. “He sido voluntaria en varias organizaciones y comulgo con los valores de Cáritas, porque me ha demostrado que siempre está ahí cuando se la necesita”, señala.