Agentes de la Policía Nacional, Policía Local, Guardia Civil, Bomberos, Agentes Forestales, Cruz Roja y grupos especializados entre los que cabe destacar medios aéreos y terrestres con perros adiestrados en esta especialidad, comienzan este martes una nueva jornada de la búsqueda de la esquiadora Blanca Fernández Ochoa.
La búsqueda profesional de la conocida deportista barrerá la sierra madrileña, traspasando a la vertiente segoviana, unas 3.500 hectáreas, 30 kilómetros en linea recta, de bosques de pino y monte bajo, valles y riscos. En concreto, abarca desde La Peñota en el término municipal de Los Molinos, hasta el puerto de Navacerrada, según explicaba la delegada del Gobierno en Madrid, María Paz García Vera.
En declaraciones ayer a los medios, la familia mostró esperanza de encontrarla con vida aunque posiblemente accidentada. Por su parte, la policía confirmó ayer que es Blanca Fernández Ochoa la mujer que se ve comprando víveres en el vídeo de un supermercado de Pozuelo, un día antes de su desaparición, lo que otorga cierta esperanza.
El vehículo de Blanca Fernández Ochoa apareció estacionado Las Dehesas el pasado 1 de septiembre. Un día antes, la Policía Nacional emitió aviso de búsqueda por la posible desaparición, denunciada por la familia ocho días antes. A día 3 de septiembre ya son 300 profesionales y 100 voluntarios, según publicaba la Policía Nacional en su Twitter, los que continúan buscando a la medallista olímpica. Entre los especialistas de la Policía, se encuentran Guías Caninos, Medios Aéreos, Policía Judicial, GEO, Caballería, UIP y Telecomunicaciones. Entre los miembros de la Guardia Civil, se encuentran agentes del EREIM de la Guardia Civil de Riaza.
El Ayuntamiento de Cercedilla explicaba a través de sus redes sociales que para la jornada de hoy un total de 50 voluntarios rastrearán la zona. A su vez, anunciaba el inicio de la formación del listado de voluntarios para el miércoles 4. Los interesados en participar deberán inscribirse llamando al 918525740 de 9:00 a 20:00 horas, no presentarse sin dar aviso, con el fin de planificar de manera óptima la búsqueda.