Las cuatro universidades públicas de Castilla y León (Burgos, León, Salamanca y Valladolid) han reclamado que la incorporación de los nuevos estudiantes se produzca “en un ambiente de convivencia pacífica”. En ese sentido, subrayaron su “firme oposición” ante “cualquier acto que suponga violencia, humillación, vejación, maltrato y sumisión de los nuevos estudiantes, o pretenda torcer su voluntad individual, conductas muchas veces asociadas a las llamadas novatadas, y con frecuencia acompañadas de otros excesos como el consumo masivo de alcohol, comportamientos abusivos, machistas o de acoso”.
En un comunicado conjunto, recogido por Ical, recalcan que “la llegada de los nuevos estudiantes debe ser la ocasión para mostrar el carácter integrador, tolerante, abierto y fraternal que define el espíritu académico y preside la institución universitaria”.
“Es nuestro deseo compartido promover un vuelco a la situación y prevenir las novatadas con un esfuerzo redoblado que vaya de la concienciación a la resistencia, y no sólo en el ámbito universitario sino en todos aquellos espacios educativos, familiares o sociales donde se puedan mantener estas prácticas”, recalcan.
En defensa de la convivencia pacífica y del respeto a los demás, las cuatro universidades públicas de Castilla y León han trabajado buscando la colaboración activa para la realización de un plan común de acción contra las novatadas. Bajo el lema ‘Cero en novatadas’, llaman a la concienciación de la comunidad universitaria, invitándola a abordar el comienzo del nuevo curso universitario como “una oportunidad de apostar por la igualdad efectiva y la integración” de los nuevos estudiantes.