Las obras de ensanche y mejora del trazado de la carretera SG-V-2111, en el tramo que discurre entre Sacramenia y Cuevas de Provanco, encaran su recta final. De hecho, gracias al avance de los trabajos la vía ya se ha abierto de nuevo al tráfico. Sin embargo, tal y como han informado desde la Diputación, aún se mantiene la señalización de obra y la restricción para el tránsito de tractores.
Los trabajos comenzaron a finales del mes de marzo y motivaron el corte de la circulación en ese tramo de vía, excepto para el acceso a fincas, el transporte público de viajeros o emergencias, entre otros. Durante este periodo se ha realizado la excavación de diferentes tipos de materiales, se ha ejecutado el terraplenado de variantes y construido nuevas obras de fábrica. Posteriormente, se han extendido las capas de zahorra artificial del firme y, más recientemente, dos capas de pavimentado con mezcla bituminosa en caliente.
No obstante, aún queda por culminar el recrecido de los arcenes, así como acometer la señalización horizontal tanto del eje como de los bordes de la calzada, instalar la señalización vertical y adecuar la barrera metálica de seguridad. Estas tareas se llevarán a cabo de manera progresiva, según ha explicado la institución provincial.
Estas obras fueron adjudicadas a la empresa Ecoasfalt S.A., por la cantidad de 344.608 euros, IVA incluido.
Durante el tiempo en el que se han desarrollado los trabajos, para circular entre Cuevas de Provanco y Sacramenia, el tráfico se ha desviado por la carretera autonómica SG-241 (sentido Peñafiel) y la SG-V-2472 -por el Caserío de San José-, así como para acceder a Sacramenia desde las provincias de Valladolid y Burgos.