Castilla y León registró durante el mes de mayo 5.569 altas de personas desplazadas temporalmente de otras comunidades autónomas que han solicitado el traslado de su tarjeta sanitaria, de ellas el 53 por ciento corresponden a residentes en Madrid y el 15,8 por ciento a ciudadanos del País Vasco.
Según los datos actualizados por la Junta y publicados en el Portal de Transparencia, ambas comunidades son las que más tarjetas de desplazados computan en la Comunidad, con repunte en el mes de mayo sobre el de abril del 19,8 y 21 por cientos, respectivamente, de madrileños y vascos.
De los residentes madrileños, un total de 1.170 se dio de alta en Ávila (39,5 por ciento), 559 en Segovia (18,8 por ciento), 244 en León (8,2 por ciento) y 241 en Salamanca (8,1 por ciento). En Burgos, fueron 181, en Palencia 82, en Soria 123, en Valladolid 136 y en Zamora 219.
En el caso de residentes en el País Vasco, el 53,4 por ciento (571 tarjetas) lo hicieron en la provincia de Burgos, y ya a bastante distancia 97 en Salamanca, 85 en Palencia y 83 en Zamora.
Del resto de comunidades limítrofes, se recibieron el cambio temporal de tarjeta de 309 residentes en Asturias, 160 en Cantabria, 143 en Castilla-La Mancha, 145 en Extremadura, 156 en Galicia, 58 de La Rioja y 84 de Aragón. De las no vecinas, 232 llegan de Cataluña y 188 de Andalucía.
Los datos de mayo son superiores a los registrados en abril, pero inferiores a los de marzo, donde se produjo solo el traslado temporal de 3.956 de residentes en Madrid y de 1.195 del País Vasco.