Reclama que no haya discriminación alguna a la hora de aplicar esa jornada entre unos empleados públicos y otros porque el aumento de horas de trabajo que se impuso en 2012 ya significó que las enfermeras y fisioterapeutas fueran las más perjudicadas por la medida.
El Sindicato de Enfermería, SATSE, en Castilla y León se concentrará mañana en la puerta del Hospital de Segovia para exigir la vuelta efectiva y real de la jornada de 35 horas para enfermeras y fisioterapeutas, profesionales que fueron los mayores perjudicados por el incremento de la jornada laboral en el año 2012.
SATSE Castilla y León insiste en que la vuelta a la jornada de 35 horas debe ser efectiva y real para todos los empleados públicos de la Junta de Castilla y León, sin discriminación alguna en función del sector en el que trabajen, como ha venido sucediendo, que al aplicarse la jornada estival de 35 horas para los empleados públicos de la Administración regional quedaron fuera los de sanidad, que sólo obtuvieron tres días libres que sólo podían disfrutar al final de año y en el primer trimestre del año 2019.
SATSE recuerda que los profesionales sanitarios del turno rotatorio fueron los más afectados con la jornada de 37,5 horas, ya que al acumular el incremento de jornada en jornadas completas perdieron entre 11 y 16 días de descanso anuales, lo que equivale a no disfrutar de ningún día festivo a lo largo de año. Este aumento de jornada supuso para estos profesionales una mayor dificultad para poder conciliar su vida familiar y laboral.
El Sindicato de Enfermería de Castilla y León pone de relieve que esta es la Comunidad que peor retribuye a sus enfermeras, la que más problemas de conciliación de su vida laboral y familiar les plantea y que menos permisos de formación concede, por lo que ese aumento de la jornada laboral hizo que esta sea la más elevada de todos los servicios de salud españoles.