Los pasajeros de un convoy Alvia retenido tres horas la madrugada del lunes en la Estación de Segovia-Guiomar denunciaron al maquinista del tren porque, aseguraron, les dijo: “de aquí no me muevo”, argumentando su decisión en que había excedido en 15 minutos su jornada laboral. El convoy, con 190 pasajeros y que debió llegar la medianoche del lunes, permaneció en las instalaciones de Adif sin que los usuarios pudieran disponer de agua y a oscuras hasta que llegó otro convoy a recogerles.
El tren que cubría la línea Ponferrada-Madrid, salió con 15 minutos de retraso, se detuvo en León prolongando la demora y fue acumulando más tiempo perdido con respecto al horario previsto y, según el testimonio de un pasajero que recoge el Norte de Castilla en su edición de Segovia “nos avisó el revisor de que el conductor había dicho que su jornada terminaba a las 11.20 y que nos dejaría en Segovia, donde llegamos a las once y veinticinco. La estación estaba cerrada y no había nadie”, explicó el usuario del tren.
Tras el incidente, los usuarios llamaron al 112 y tuvo que intervenir la Policía, que levantó el atestado que se unirá a las denuncias de los viajeros que, finalmente, llegaron a la estación de Chamartín de Madrid pasadas las cuatro de la mañana/Ical