La Dirección General de Comercio y Consumo ha impulsado una línea de ayudas que están dirigidas a pequeñas y medianas empresas artesanas de Castilla y León, tanto para establecimientos en funcionamiento como de nueva creación, que tengan reconocida la condición de taller artesano o, en su caso, hayan solicitado esta acreditación.
Su objeto es incentivar la introducción de mejoras en sus sistemas de producción y/o gestión, así como en la comercialización de sus productos, sobre la base de la incorporación de tecnologías de la información y la comunicación. Entre las acciones financiables, se incluyen la adquisición y montaje de maquinaria vinculada al proceso productivo; los servicios de apoyo a la instalación y puesta en marcha de modelos de gestión automatizada y venta ‘online’, y la formación necesaria para su optimización.
La cuantía de la subvención individual para cada iniciativa alcanza el 30 % del presupuesto aceptado, que no podrá superar los 15.000 euros. Entre los criterios de valoración, tendrán prioridad los establecimientos de nueva constitución por su capacidad para generar actividad y puestos de trabajo. Se primarán también los proyectos que se ubiquen en el medio rural –la puntuación será mayor cuanto menor sea el tamaño del municipio en términos de población– y los que se localicen en las cuencas mineras. De esta forma, se promueve la dinamización económica y demográfica de nuestros pueblos y de las comarcas más afectadas por la reestructuración de la minería del carbón.
Más de doscientos artesanos y 32 talleres en la provincia
La Junta considera la artesanía un sector clave para la economía de la Comunidad. Así, en el Registro de Artesanos de Castilla y León –instrumento de inscripción voluntaria que ordena la actividad en secciones diferenciadas– figuran 2.514 profesionales reconocidos como artesanos, 642 talleres artesanos, y 20 asociaciones y federaciones artesanas.
Al finalizar el año 2015, en el Registro Artesano de Segovia figuraban registrados 213 artesanos sin taller, 32 talleres artesanos y 2 asociaciones, en concreto el ‘Gremio Artesanal Segoviano’ y el ‘Colectivo de Ceramistas Segovianos’ (COCERSE).
Estrecha vinculación al medio rural
Es preciso destacar como singularidad de este oficio su estrecha vinculación con el territorio, en particular, con los pequeños municipios. De hecho, alrededor del 70 % de los talleres artesanos incorporados al Registro autonómico están asentados en los pueblos. A esta circunstancia se une la fuerte presencia femenina en este sector, ya que casi el 46 % de los profesionales en ejercicio son mujeres. Ambos factores confieren mayor capacidad a la artesanía para contribuir a fijar población en el medio rural.
Estas razones justifican el apoyo del Gobierno autonómico al sector, ya que la artesanía sigue constituyendo no sólo un instrumento de fomento del autoempleo, sino que, además, contribuye al desarrollo rural. El mayor volumen de ventas de artesanía se lleva a cabo en las diferentes ferias de artesanía, de muestras, mercados medievales o similares.
El Registro Artesano es un registro de carácter voluntario y constituye el medio por el que la Administración de Castilla y León reconoce a quienes en él se inscriban la condición de artesanos, requisito imprescindible para concurrir a las ferias de artesanía y beneficiarse de las líneas de ayudas dirigidas al fomento y protección de la artesanía.
Foto: Feria de artesanía a los pies del acueducto/ICAL