El Sindicato de Enfermería SATSE demanda 769 enfermeras en Segovia para igualar la ratio de los países de la OCDE.
De este modo, alerta del déficit de enfermeras que registra la provincia para alcanzar los niveles de los países de la OCDE se sitúa en 769.
De hecho, SATSE Segovia destaca que la provincia se encuentra con menos de la mitad de las enfermeras por cada 1.000 habitantes que registran los países de la OCDE.
En estas naciones, la ratio es de 9,04 enfermeras por cada 1.000 habitantes, mientras que Segovia, con aproximadamente 667 enfermeras en Sacyl y una población de 157.299 habitantes, tiene una ratio de 4,2 profesionales enfermeras.
Por ello, ante estos datos, SATSE Segovia ha reclamado a las administraciones sanitarias medidas.
Administraciones sanitarias
El objetivo es «acabar con el déficit de enfermeras que provincias como Segovia están registrando desde hace años, aunque valora positivamente que el Ministerio de Sanidad haya reconocido esa necesidad de enfermeras». Así, apunta, «el reciente estudio presentado por el Ministerio de Sanidad plasma una realidad conocida y denunciada de manera reiterada por SATSE».
«Los problemas existentes con el déficit estructural de plantillas enfermeras en SACYL no son algo nuevo, sino que se han “perpetuado” con el paso de los años», apuntan desde la organización sindical.
Por ello, demanda medidas que atajen el problema por sus graves implicaciones para los profesionales, que se ven obligados a soportar cargas de trabajo que afectan a su salud, así como para los pacientes, que ven cómo la asistencia sanitaria se resiente.
Entre 15 y 20 pacientes por profesional de enfermería
El Sindicato de Enfermería recuerda que la media de pacientes que son atendidos por una sola enfermera en un hospital oscila entre los 15 y más de 20, cuando la ratio segura y adecuada no debería superar los ocho pacientes.
Esta situación «conlleva más riesgos y complicaciones y un aumento de las muertes, según evidencian todos los estudios y análisis científicos realizados al respecto. SATSE lleva tiempo alertando de que este importante déficit de enfermeras y enfermeros implica, según distintos estudios científicos nacionales e internacionales, que las complicaciones en el proceso de atención y cuidado aumenten e, incluso, haya más fallecimientos».
Así, «la infradotación de enfermeras y enfermeros supone un aumento de un 7% de la mortalidad en pacientes hospitalizados».
SATSE ha recordado, además, que ha liderado una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) que busca garantizar por ley un número máximo de pacientes por cada enfermera o enfermero y ofrecer así una atención sanitaria más segura y de mayor calidad. “Debemos acabar con riesgos innecesarios para la salud y seguridad de los pacientes y los profesionales que cuidan de ellos”, ha apuntado SATSE Segovia.