Kían Mata Kim tiene 10 años, tenía 9 cuando grabó el programa, y es un niño sordo, que tiene implantes cocleares, alumno de 5º EP en el Colegio Claret de Segovia, y participante en ‘El Piano‘.
De padre español y madre surcoreana, Kían vive en La Granja de San Ildefonso con su hermano mayor, Juno, de 12 años.
Kían Mata Kim aparece en uno de los capítulos del nuevo programa musical de La Sexta, ‘El Piano’.
El jovencísimo pianista saldrá en la tele este martes 3 de diciembre, a las 22:30 horas, aunque ya está disponible en pre-estreno en la app de Atresplayer, en el segundo capítulo de la serie que la cadena estrenó el pasado 26 de noviembre.
Presentado por Ruth Lorenzo, y con la participación de los músicos Pablo López y Mika, en el programa pianistas amateurs tocan en una estación de tren, rodeados de gente que pasa por la estación.
Historias de superación
Sin embargo, no son pianistas «sin más». Además, cada uno de ellos tiene una historia detrás.
Todos conviven con historias de superación personal o experiencias curiosas de cómo llegaron a aficionarse al piano.
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Kían fue al programa «sin saber muy bien dónde iba», dice Francisco, al que le resultó interesante que su hijo pudiera «estar con otros artistas y con productores de televisión». Finalmente, «la experiencia fue estupenda y se lo pasó fenomenal. Disfrutó muchísimo entre otros pianistas, y profesionales del mundo de la televisión».
También recuerda que «fue una jornada de grabación muy larga, y Kían no aguantó despierto tantas horas hasta la noche, que es cuando se grabó la escena final con todos los pianistas juntos. Por eso la presentadora, Ruth Lorenzo, se lo llevó con él, para mantenerlo de pie y que no se durmiera más«.
Kían, un talento increíble para el piano
Todo empezó cuando a los padres de Kían les llamaron de la productora del programa para ver «si queríamos participar, porque habían leído un pequeño reportaje que había salido en el ABC». Ese artículo relataba cómo Kían, a pesar de su sordera, con implantes cocleares, «tiene un talento increíble para el piano«, señala Francisco, su padre. De hecho, añade, «tiene oído absoluto».
Así, explica con detalle, «como llama tanto la atención no sólo el fantástico rendimiento de sus implantes, si no también su talento natural para el piano, pensaron que podía ser un participante estupendo para el programa».
A sus padres, Francisco Mata y Jeanne Kim, les gustó mucho la idea de participar en el programa.
Pensaron que la intervención de Kían podía ayudar a vencer el miedo y la incertidumbre a aquellos padres con hijos sordos que se plantean los implantes cocleares para sus hijos.
«Ver a Kían desenvolverse así puede inspirarles al ver lo bien que ha resultado su caso». afirman Francisco y Jeanne.
Los padres de Kían reconocen que lo pasaron muy mal en su día, e intentan ayudar y aconsejar a padres que estén pasando por lo mismo en la actualidad.
Kían se quedó sordo por un virus durante la gestación
La sordera de Kían no es de origen genético, sino que se debe a un virus que le afectó durante el periodo de gestación.
«Kían nació bien, oyendo perfectamente, pero a partir de su quinto mes, más o menos, empezó a perder audición poquito a poco», recuerdan.
Al final, le colocaron sus implantes cocleares con dos años. El proceso tampoco fue fácil para el propio niño. Acostumbrado a no oír, «se quitaba los procesadores de sus implantes continuamente, los tiraba, los mordía… Y fue gracias a ‘Just Dance’ que se interesó por escuchar, pues descubrió que le encantaba bailar«.
Así, al ver el movimiento de los muñecos en la pantalla e identificar que se movían al son de la música, su cerebro se fue adaptando al estímulo sonoro.
Posteriormente, se aficionó al piano ya que su hermano mayor, Juno, lo toca y es alumno del Conservatorio de Segovia.
Un niño alegre, con fuerte personalidad, que quiere ser YouTuber
A Kían le encanta hacer vídeos, sobre todo tutoriales de cosas que sabe hacer, y dice que de mayor quiere ser YouTuber. Otras aficiones que tiene son los idiomas y el cubo Rubik.
«Con una personalidad muy fuerte, Kían es un rayito de luz que alumbra allá donde va, repartiendo alegría a todos», dice satisfecho su padre. De hecho, añade, «Kían nos ha enseñado mucho. Su manera de sobreponerse a todo, y además hacerlo con esa actitud tan positiva y alegre que tiene, es muy inspirador«.
*Fotografías facilitadas a Segoviaudaz.es por Francisco Mata, padre de Kían.