Se trata de un pueblo de apenas 50 habitantes cuenta con una larga tradición vitivinícola. En el Diccionario Geográco, Estadístico e Histórico, publicado por Pascual Madoz en 1846, se dice que había 6 lagares, 40 bodegas y 60 hectáreas de viñedo. Esos números aumentaron sensiblemente con los años: Así, el censo realizado en 2023 arroja una cifra de 42 lagares y lagaretas y cerca de 100 bodegas subterráneas, y 75 hectáreas de viñedo en Aldehorno.

Este viernes, el El Ayuntamiento de Aldehorno inaugura el lagar rupestre denominado “Cueva de la Zorra”, recientemente recuperado con la ayuda de CODINSE, y con la aportación de esta entidad municipal.

Se trata de una construcción rupestre, excavada a mano en la falda de la ladera. En la oquedad resultante se construyó un lagar de viga tradicional muy singular, en el que la propia cubierta de la ladera hace las veces de tejado. Los elementos esenciales de un lagar tradicional son la caja, donde se echa y prensa la uva, la pila donde vierte el mosto, la viga (tradicionalmente de olmo, muy abundante en la zona hasta la aparición de la graosis), el cargadero o punto de apoyo en el extremo grueso de la viga, la piedra y el husillo. El conjunto forma una palanca de segundo grado, muy útil para el prensado de la uva.

El estado actual de la mayoría de los lagares es de ruina, como consecuencia de la propiedad compartida de casi todos, propiedad que se medía por los cestos que tenía cada aparcero. Cuando dejaron de usarse, por vender la uva directamente a bodegas del entorno y de otras provincias, se dejó de atender el mantenimiento de estos lagares, lo que ha ido provocando su ruina. Hoy sólo quedan tres lagares en pie.

El Lagar de la Cueva de la Zorra ha sido recuperado con Fondos de Desarrollo Rural Europeo de la Iniciativa LEADER, gestionados por el Grupo de Acción Local CODINSE (Coordinado- ra para el Desarrollo Industrial del Nordeste de Segovia), la aportación del Ayuntamiento de Aldehorno y la colaboración desinteresada de varias personas.