El sector inmobiliario castellanoaragones está viviendo un periodo de estabilidad y crecimiento, recuperando las cifras prepandémicas, tal y como indican los datos del INE de 2021, el pasado año se cerraron 565.523 ventas de inmuebles, la mejor cifra alcanzada en los últimos catorce años.
Los inmobiliarios también afirman que estan viviendo un buen índice de operaciones de compraventa, esto se puede ver reflejado en la X edición del Barómetro Inmobiliario, ‘El sentimiento de mercado de los profesionales inmobiliarios, un estudio realizado por la Unión de Créditos Inmobiliarios (UCI). El barómetro analiza la percepción de los agentes inmobiliarios en el último trimestre de 2021 y cómo ven la proyección del sector para los próximos meses
Los datos extraídos son que «7 de cada 10 inmobiliarios castellanoleoneses hablan de estabilidad y aumento moderado y medio en el cierre de operaciones en el último trimestre de 2021 (77,8%), con un incremento de más de 2 puntos porcentuales con respecto al tercer trimestre de 2021 (75%)» aseguran los miembros de UCI que han realizado el estudio.
Debido a las buenas tendencias, los profesionales cada vez estan teniendo más dificultades en el momento de captar nuevos clientes vendedores. Aun así la previsión del mercado para este año se mantiene en positivo. De hecho más de 6 de cada 10 profesionales preeven que se estabilizara el número de vendedores y el crecimiento será moderado.
Este dato hace que se estime que el precio de la vivienda en venta crecerá una media de 4,4% en este año, esta vez por debajo de la media nacional de 4,5%. La subida del precio de la vivienda presenta diferencias por regiones. Los inmobiliarios de País Vasco (7,9%) y Baleares (7,8%) piensan en mayor medida en estas subidas, frente a las regiones donde se estiman menos subidas: Asturias(1,4%), Extremadura (2,3%), Región de Murcia (2,8%), Comunidad de Madrid (3,5%) y Canarias (3,7%).
Las previsiones para este año son que la compraventa siga superando al alquiler, los agentes inmobiliarios de Castilla y León apuntan a un crecimiento del 6,1% en las ventas de inmuebles frente a un 4,2% en el alquiler. En relación a los precios para los inquilinos, debido a la amplia demanda se estima una subida cercana al 4,6%.