La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Segovia ha autorizado una modificación presupuestaria de 70.000 euros para el derribo de los 46 «miniapartamentos» que se empezaron a construir en 2005 en una huerta del valle del Eresma calificada como suelo rústico. La alcaldesa Clara Luquero ha asegurado que todavía no se ha concretado la fecha en la que se llevará a cabo la demolición, ya que todavía debe darse el visto bueno a la partida económica para su ejecución en la próxima junta del 20 de noviembre.
Luquero ha recordado, en declaraciones recogidas por Ical, que el Consistorio ya inició el procedimiento de ejecución forzosa del derribo, que fue ordenado por el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Castilla y León para que se restituyera la legalidad urbanística. En principio, el juez dio un plazo de tres meses a la empresa promotora de los «miniapartamentos», Hontanilla de Santo Domingo S. A., para que llevará a cabo la sentencia, que finalmente no han realizado y que ha tenido que asumir el Ayuntamiento.
La alcaldesa señaló que el Consistorio «va a utilizar todos los instrumentos tanto legales como ejecutivos a su alcance para cobrar a esta empresa lo que le corresponde o los embargos que sean necesarios». La modificación presupuestaria ha afectado a semáforos y radares fijos previstos en el presupuesto municipal de este año.
El pasado mes de abril el TSJ impuso una multa de 210.000 euros a Hontanilla de Santo Domingo S. A., cuyo titular  es el exconcejal del Partido Popular Ángel Sancho, al «intentar construir una residencia de estudiantes en suelo rústico de especial protección». Al arquitecto Tomás Arranz Sanz, por su parte, le impuso «una multa de 122.500 euros» por la misma causa. En noviembre de 2012 el Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Segovia, había rebajado las sanciones a 40.500 y 23.625 euros, respectivamente, cuando el Ayuntamiento solicitaba 540.000 y 315.000 euros. En cualquier caso, ya entonces la Justicia declaró ilegales estas viviendas construidas en un muro de contención para estudiantes de la antigua Universidad SEK, al considerar además que se proyectaron con vistas a una futura recalificación. La última decisión judicial sobre este asunto se conocía el pasado 6 de noviembre, cuando el TSJ desestimó el recurso presentado por Hontanilla de Santo Domingo S. A. en el que solicitaba que la parcela de los «miniapartamentos» fuera declarada suelo rústico consolidado.