221.000 euros para 22 pueblos de Segovia
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Los próximos 8 y 9 de noviembre, más de 65 ornitólogos, procedentes de al menos ocho comunidades autónomas (Andalucía, Aragón, Cantabria, Cataluña, La Rioja, Castilla La Mancha, Castilla y León, y Madrid), participarán en el censo de otoño Nº 32, en el Refugio de Rapaces de Montejo y su entorno (hoces del Riaza y alrededores; nordeste de Segovia, sur de Burgos, y suroeste de Soria) bajo la coordinación de Juan José Molina Pérez, y organizado por el Fondo para el Refugio.

El censo de otoño consiste en contar simultáneamente los buitres y otros vertebrados salvajes de la zona, en el segundo o tercer fin de semana de noviembre, poniendo un observador experimentado enfrente de cada peña o de cada lugar donde puedan dormir estas aves, al anochecer y al amanecer. El censo viene efectuándose desde 1983 cuando el matemático José María  Martínez Mediano diseñó el sistema para la observación. Desde entonces han sido más de 660 los naturistas los que de manera desinteresada han participado en uno o varios censos de aves.

El próximo sábado, a las 12 h., tendrá lugar la reunión previa, en  Villaverde de Montejo (Segovia), en el local de la asociación cultural “Nuevo Horizonte” pudiendo asistir a esta reunión cualquier persona que lo desee. Además, se presentarán las dos nuevas circulares del Fondo para el Refugio (44 y 68 páginas, respectivamente, diseñadas y maquetadas por Elías Gomis Martín), y las dos últimas Hojas Informativas sobre el Refugio (Nº 40 y Nº 41, con 988 páginas entre las dos, recientemente reeditadas, y disponibles en la Tienda Verde). Todas estas publicaciones están disponibles también en Internet, en www.naturalicante.com, gracias a Raúl González Rodríguez.

El censo tendrá lugar el sábado por la tarde y al anochecer, de 16 a 19 h.; y el domingo al amanecer y por la mañana, de 6 h. 30 m. a 10-12 h. Como es habitual, cada peña está controlada por un naturalista experto para registrar, simultáneamente, cuántos buitres y otras aves pasan la noche en cada sitio, las horas y lugares donde cantan los búhos y demás rapaces nocturnas, etc. También se censan las aves acuáticas del embalse de Linares, y de distintas zonas húmedas del sur de Burgos; y se registran todos los vertebrados posibles en un área muy amplia (que cubre prácticamente todo el Refugio, y gran parte de sus alrededores). El domingo, cada participante entrega un primer informe parcial provisional. Los informes parciales definitivos, cuya elaboración lleva mucho más tiempo, permitirán  elaborar después el informe final, que supone cientos de horas durante varios meses de intenso trabajo, y que se publica en www.naturalicante.com (donde pueden verse los anteriores). Toda esta labor es completamente altruista.

Foto: Las hoces del Río Riaza, un paraíso para las rapaces/Ical