Los segovianos califican su calidad de vida con “un notable alto”, incluso en algunos aspectos de “sobresaliente”. Así se desprende de la encuesta elaborada por el Departamento de Geografía de la Universidad de Valladolid (UVa) y que forma parte del Estudio de Diagnóstico que servirá de base para el nuevo Plan Estratégico Provincial 2015-2019 que desarrollará la Diputación. Este informe sobre el territorio y las condiciones de vida en Segovia recoge “los grandes retos” a los que debe hacer frente la institución provincial en la próxima legislatura: promoción económica, pérdida demográfica y envejecimiento de la población, empleo y los problemas asociados a la prestación de servicios.

Además, define la necesidad de crear un nuevo modelo territorial con el que evitar “los desequilibrios” existentes actualmente entre el medio rural y el urbano. “A nosotros nos gusta la teoría de los ‘smart territory’, los territorios inteligentes”, apuntó Luis Carlos Martínez, profesor encargado de este estudio, que señaló algunos aspectos para conseguir este objetivo como “el espíritu innovador, el emprendimiento, la imagen económica y de marcas, la mejora de los servicios públicos o el transporte a la demanda, donde Segovia es una de las que mejor lo está desarrollando”.

Durante la presentación hoy del diagnóstico, el presidente de la Diputación segoviana, Francisco Vázquez, recordó que con toda esta información se pondrán en marcha diferentes mesas de trabajo “que darán forma al próximo Plan Estratégico Provincial”. “Desde la institución somos conscientes de que trabajamos por personas y para personas, y por tanto responderemos a la realidad de este territorio vivo que es la provincia y que queremos iniciar con este nuevo proceso de estudio con la UVa”, remarcó.

Por su parte, el diputado de Promoción Económica, Rafael Casado, incidió en que ya se cuenta con un esbozo de las mesas de trabajo y confió en iniciar los trabajos “a mediados del mes de octubre” con el objetivo de poder tener listo el plan el 31 de diciembre. “Este informe nos abre muchas posibilidades y ahora tenemos que ver entre todos cómo las explotamos”, apuntó.

El Estudio de Diagnóstico forma parte de un convenio de colaboración de la Diputación y la Universidad de Valladolid y se ha desarrollado por un equipo de siete personas durante seis meses. El director del Departamento de Geografía de la UVa, Alipio García de Celis, manifestó la innovación que ha supuesto, “porque no se había realizado ningún informe territorial para la provincia de Segovia”, y la continuidad, “por la transferencia de conocimientos”.

A más de 480 personas

Este análisis territorial de la provincia incluye por primera vez una encuesta propia sobre la calidad de vida de los ciudadanos, como detalló la profesora Almudena Moreno, para la que se ha tomado como base las que se realizan en la Unión Europea sobre esta materia. En total realizaron la consulta a 481 personas de todos los municipios con la conclusión de que “los segovianos definen su calidad de vida de notable alto, incluso en algunos aspectos de sobresaliente”, señaló.

Pero el Estudio de Diagnóstico analiza otros muchos factores que influyen en “una provincia en transformación”, como destacó Luis Carlos Martínez, que incidió en que uno de los principales “fuertes” de Segovia era “la gran potencia agropecuaria” que tiene y puso como ejemplo El Carracillo, “que es la huerta de Castilla y León”. “Ligado a esto está el desarrollo rural y otra serie de actividades como el turismo que hay que tener en cuenta”, añadió. Además, consideró que se debía seguir apostando por “la economía del conocimiento”, apostando para que Segovia sea un campus de referencia en la región.

Respecto a la población, Martínez se refirió a que la provincia “es en términos relativos la que mayor peso tiene en el fenómeno migratorio extranjero en Castilla y León, aunque en estos momentos se está ralentizando la llegada de inmigrantes”. Y advirtió también sobre el decrecimiento y el envejecimiento de los habitantes.

Entre las fortalezas de Segovia destacó la existencia de un área urbana intermedia dentro de la Comunidad, el elevado número de centros comarcales de servicio, “que son elementos claves para equilibrar el territorio y a partir de ellos prestar servicios para hacer ese modelo territorial”, y la posibilidad de que la industria agropecuaria siga creciendo, frente a debilidades como la escasa industria.

Imagen: Diego de Miguel/ ICAL