El Partido Popular se ha convertido en la fuerza más votada en Castilla y León en las Elecciones al Parlamento Europeo celebradas hoy, al cosechar el 37,57 por ciento de los votos (357.500), 14,16 puntos más que el PSOE, que logró el 23,41 por ciento y se convirtió en la segunda formación con mayor representación, con 222.732 apoyos. Pese a que continúa el bipartidismo en la Comunidad, con un 60,98 por ciento de los votos, el electorado ha castigado a los dos partidos mayoritarios, en especial a los socialistas que han perdido fuerza por la fragmentación de la izquierda.

Este hecho se traduce en subidas destacadas en UPyD (pasa del 3,66 por ciento de 2009 a un 8,36 por ciento con 79.615 votos), IUCyL (de un 2,34 a un 8,32 por ciento, con 79.179) y en la candidatura ‘Podemos’ que irrumpe en sus primeros comicios con el 8,17 por ciento, lo que se traduce en 77.779 apoyos. Estas tres fuerzas minoritarias acumulan en Castilla y León el apoyo de la cuarta parte de los que acudieron hoy a las urnas, en concreto, del 24,85 por ciento, con el 99,08 por ciento de los votos escrutados.

La evolución de los dos partidos mayoritarios en la Comunidad ha sido similar a la situación registrada en España, donde los ‘populares’ vuelven a concentrar la mayoría del voto del electorado, 26,05 por ciento, frente al 23,02 de los socialistas, si bien con sendas caídas de 16 y 15 puntos que impiden que entre los dos concentren el 50 por ciento de los votos. En la otra cara de la moneda, la Izquierda Plural (9.99 por ciento); la candidatura ciudadana de Pablo Iglesias, Podemos, la cuarta formación más votada, con el 7,95, y UPyD, que suma el 6,48 por ciento. De este modo, los populares suman 16 diputados, ocho menos que hace cinco años, cuando contaron con 24, y el PSOE reduce su presencia en el Parlamento Europeo, con 14, cuando en 2009 logró 23.

En ambos casos, volverán al Parlamento Europeo los candidatos de Castilla y León que concurrían a los comicios, Iratxe García (PSOE) y Agustín Díaz de Mera (estuvo al límite al ocupar el puesto 16 de la lista), al igual que Francisco Sosa Wagner, cabeza de lista de UPyD, formación que contará con cinco diputados en la eurocámara.

 

PP y PSOE, las grandes castigadas

A las puertas de las elecciones generales, el electorado de Castilla y León castigó a las dos fuerzas mayoritarias que perdieron el 41 por ciento de los apoyos que lograron en los últimos comicios europeos de forma conjunta, al pasar de los 993.524 de 2009 a los 580.232 de los que se celebraron hoy. En 2009, el PP acaparó el 51,69 por ciento de los votos (571.252) y el PSOE, el 38,21 por ciento (422.272 papeletas). Es decir, en conjunto sumaron 993.524 votos, el 89,9 por ciento. Hoy la realidad son 580.232 votos, (es decir 413.292 menos), el 60,98 por ciento de los votos. Se trata del dato más bajo en unos comicios europeos que hasta ahora se correspondía con los de 1989, cuando sumaron un 69 por ciento.

 

La abstención sube

La abstención fue otra de las protagonistas de la jornada electoral en la Comunidad. Se elevó al 51,48 por ciento, lo que supone un incremento de casi tres puntos con relación a los comicios de 2009, cuando el porcentaje se situó en el 48,58. En comparación con España, la Comunidad registró una mayor participación al alcanzar el 48,52 por ciento, mientras que en el conjunto del país fue del 45,86 por ciento.

Estas cifras marcan otro hito en la historia de las europeas en la Comunidad, por lo general los comicios en los que menos se vota. De hecho, se trata de la abstención más alta desde 1987 (primeras europeas), que hasta ahora era la de 2009, cuando fue del 48,58 por ciento.

 

El voto de castigo, también sube

A la abstención se suma la falta de entusiasmo por las propuestas de las diversas formaciones, que se traduce también en un aumento del voto en blanco entre el electorado en la Comunidad. En concreto, se elevó al 2,91 por ciento, el más alto también en la historia de estos comicios que hasta ahora era el que se produjo en 1999, con un 2,43 por ciento. En 2009 se situó en el 1,45 por ciento.

 

Granero de votos

Castilla y León en su conjunto volvió a constatar que sigue siendo un granero de votos para el Partido Popular, aunque de forma desigual en las nueve provincias. Así, en Ávila, el PP obtuvo el respaldo del 46,96 de los que votaron, cuando en 2009 sumó un 60,01 por ciento, mientras que el PSOE se hizo con el 19,80 por ciento, frente al 30,91 de los pasados comicios. En esta provincia, UPyD logró un 8,35 por ciento, frente al 3,36 por ciento anterior.

En Burgos, el PP sumó el 36,85 por ciento, también por debajo del 51,81 por ciento de 2009, y el PSOE, el 20,14 por ciento, por debajo del 35,93 por ciento anterior. En esta provincia el partido de Ortega Lara y Alejo Vidal-Quadras, Vox, se convirtió en la sexta fuerza más votada (3,16 por ciento), por detrás de Podemos (9,65 por ciento), UPyD (9,08 por ciento) y IUCyL (8,28 por ciento).

En León, el PP contó con el respaldo del 33,16 por ciento de los votantes, menor también que en 2009, cuando logró un 46,17 por ciento; el PSOE con el del 27,57 por ciento, por debajo también del 44,97 por ciento de los últimos comicios europeos. En esta provincia, UPyD la formación del cabeza de lista leonés, Francisco Sosa-Wagner, fue la quinta formación más votada, con un 6,93 por ciento, también en la tónica general del país, ya que en 2009 sumó un 2,93 por ciento. En tercer lugar se situó podemos (9,5 por ciento) y en cuarto, IUCyL (8,59 por ciento).

En Palencia, el PP fue la fuerza más votada con el 39 por ciento votos, seguida por el PSOE, con el 25,76 por ciento. Las dos formaciones bajaron su respaldo sobre 2009, cuando lograron el 51,79 y el 39,28 por ciento de las papeletas.

En Salamanca, la fotografía fue similar, con un 41,74 por ciento para el PP, cuando en 2009 se cerró con el 55,24 por ciento, y un 22,87 por ciento para el PSOE, por debajo del 35,57 por ciento anterior. Del mismo modo, en Segovia se mantuvo el peso del PP, con el 39,49 por ciento (54,49 por ciento en 2009) y el PSOE logró el 21,34 por ciento (34,36 por ciento en 2009).

En Soria, se repitió la evolución del resto de Castilla y León, con un 41,34 por ciento para el PP (53,36 por ciento en 2009) y un 21,87por ciento para el PSOE (37,40 en 2009).

En Valladolid también triunfó el PP, eso sí, con menos apoyos que en 2009, al sumar 33,62 por ciento, frente al 49,37 por ciento de 2009. Por su parte, el PSOE logró el 23,04 por ciento, frente al 38,61 por ciento de hace cinco años. En esta provincia la tercera fuerza más votada fue IUCyL (10,16 por ciento), seguida por UPyD (9,83) y Podemos (9,38).

Finalmente, en Zamora el PP revalidó su mayoría, con el 41,79 por ciento (54,07 por ciento en 2009), y el PSOE siguió como la segunda fuerza más votada, con un 24,38 por ciento (38,6 por ciento hace cinco años).

 

DEJA UNA RESPUESTA