11 de abril de 2018.

El precio de la vivienda en alquiler en Castilla y León vivió en el primer trimestre del año una subida del 4,8% que estableció el metro cuadrado en 6,1 euros mensuales, según el último informe de precios de idealista. En tasa interanual el ascenso se situó en 10,6%.

Provincias castellano leonesas

Segovia, es la provincia que mayor subida ha experimentado, con un 5,7%.

Dos provincias registran precios inferiores a los que tenían hace solo un trimestre. La mayor caída se ha producido en Zamora, donde los propietarios piden un 2,5% menos por arrendar sus viviendas, seguido por la caída de León (-1,3%).

Tras ella, se sitúan las provincias de Salamanca (5,1%), Ávila (3,7%), Burgos (2,1%) y Valladolid (0,3%). En Palencia y Soria la muestra ha sido insuficiente para hacer un análisis estadístico.

La provincia más económica para alquilar es la de Ávila, que ha situado sus precios en 4,2 euros/m2. En el lado opuesto de la tabla se posiciona la provincia de Salamanca, donde el precio del metro cuadrado alcanza los 7 euros mensuales.

Capitales de provincia

Entre las capitales son tres las únicas que han reducido sus precios durante el invierno. León lidera las caídas, con un decremento en sus rentas del 2,1%, seguida por Ávila (-1,7%) y Zamora (-1,3%). En el lado opuesto de la tabla están las subidas de Segovia (4,9%), Salamanca (4,9%), Burgos (3,1%) y Valladolid (1,4%). Al igual que sucede con las provincias, las ciudades de Palencia y Soria no disponen de muestra suficiente.

Salamanca es la capital castellano leonesa con los precios más elevados: 7,4 euros/m2. Le siguen Segovia (7,2 euros/m2) y Valladolid (6,7 euros/m2). Zamora, en cambio, es la más económica con 4,5 euros/m2.

Subidas descentralizadas

El precio de la vivienda en alquiler se ha incrementado en España un 8,8% durante el primer trimestre de 2018, hasta dejar el metro cuadrado en 10,6 euros al mes. En tasa interanual, el crecimiento llega al 18,3%.

El precio aumenta en todas las comunidades autónomas durante los últimos 3 meses, siendo Baleares donde más crecieron (12,1%) y La Rioja donde menos lo hicieron (1,4%).

En la ciudad de Barcelona los precios se han mantenido estables, con una subida del 0,8%, tras la caída experimentada en 2017. El metro cuadrado se ha situado en 17,6 euros/m2. Aún así la tasa interanual todavía es negativa: -2,7%.

Madrid finaliza el invierno con una subida trimestral en el precio del alquiler de vivienda del 2,7%, lo que sitúa el precio del metro cuadrado en la capital en 15,9 euros (un 7,8% más que hace un año).

El precio del alquiler creció un 5,6% en Valencia durante el primer trimestre (un 14,8% interanual). Esta subida ha dejado el precio del metro cuadrado en 8,7 euros.
Del resto de capitales destaca la subida de Cuenca, donde sus propietarios han aumentado un 7,4% el precio de sus inmuebles en alquiler, seguida por Girona (7,4%), Zaragoza (6,9%) y Guadalajara (5,9%). Tarragona, en cambio, marca la mayor caída de entre las 12 capitales que han reducido sus precios este invierno (4,6%). Le siguen las caídas de Granada (-4,5%) y Pontevedra (-2,5%).

Barcelona es la capital española con los alquileres más caros (17,6 euros/m2), seguida de Madrid (15,9 euros/m2) y San Sebastián (14,6 euros/m2). En cuarto lugar se sitúa Palma con un precio de 12,7 euros por cada metro cuadrado. En la parte opuesta de la tabla encontramos Zamora, la capital más económica, con un precio de 4,5 euros/m2, Cáceres (4,6 euros/m2) y Ávila, con 4,7 euros/m2.

Según Fernando Encinar, jefe de estudios de idealista, “durante este trimestre las mayores subidas han pasado de los grandes mercados, donde el alquiler parece haber alcanzado techo, a otras capitales donde hasta ahora el impacto de las subidas había sido menor como Cuenca, Girona, Zaragoza o Guadalajara.

En ciudades como Málaga o Alicante los propietarios ya han empezado a bajar las rentas y Barcelona también registra caídas en su evolución interanual. Los datos demuestran que el techo natural de los alquileres está en las posibilidades reales de los potenciales inquilinos y no en la intervención del mercado, un intentó que ya se ha ensayado en París y Berlín, con pésimos resultados.